No se preocupen si no disponen de reserva en este momento. Son siempre bienvenidos. Aún tenemos para ustedes sitios con excelentes vistas y acústica. Por favor, acompáñenme por aquí, si son tan amables. Les dejo la carta de vinos. Casi todos son del periodo entre 1800 y 1950, aunque ya saben que en nuestra bodega la mayoría de nuestros caldos son de la segunda mitad del siglo XVIII. Enseguida vendrá Don Octavio para sugerirles sus propuestas de degustación.
Es un placer tenerlos en casa de nuevo. Espero que todo sea de su agrado. Si me permiten, les comento las novedades para esta temporada. Toda nuestra cocina es internacional aunque predominan los platos alemanes y franceses, sin descuidar las especialidades austríacas, inglesas, italianas o de nuestra tierra.
Entre los entrantes que les recomiendo están el Preludio a la siesta de fauno de Debussy, la Suite Arlesiana de Bizet, Una noche en el Monte Pelado de Mussorsky, la Oración de Torero de Turina, el Vals Triste de Sibelius, la Obertura de Fanny Mendelssohn, la Obertura Orlando de Haendel o si prefieren algo más exótico, la Kisoboka de Barker y Fernie.
Entre los aperitivos les sugeriría música de piano como solista de Beethoven, Chopin, Granados y Liszt.
En relación con los platos principales les propongo comenzar por un concierto y continuar con una sinfonía. Para los amantes del violín, recomendamos encarecidamente los conciertos de Mendelssohn, Chaikovsky y Beethoven. Otra opción siguiendo la misma cuerda sería el concierto para violonchelo de Dvorak. También podrían decantarse en esta ocasión por el Concierto de Aranjuez de Rodrigo, el de cuatro trompas de Strauss o el de dos pianos de Mozart.
En el grupo de sinfonías, hay al menos once que son imprescindibles de degustar esta temporada. La Cuarta de Mendelssohn, la Novena de Schubert, la Tercera de Schumann, las cuatro de Brahms, la Primera y Sexta de Chaikovski, la Quinta de Sibelius, la Quinta de Shostakovich y por supuesto la Novena de Beethoven.
Para un mínimo de dos personas disponemos de platos especiales como son el Pájaro de Fuego de Stravinsky, la Canción de la Tierra de Mahler y el Homenaje a la Tierra con piezas de estilo Barroco.
La novedad dela carta es la obra para metales de Ricardo Mollá. No me pregunten mucho porque es una obra de estreno.
Entre los postres tenemos Cantatas de Bach, la Sinfonía Gaélica de Beach, la Sinfonía da requiem de Britten, Sinfonías de los Scarlatti y alguna que otra dulce sorpresa.
Además de Virginia Martínez, nuestra prestigiosa e internacional chef de cocina implicada tanto en la planificación del menú como en la presentación y puesta en escena de la mitad de nuestra oferta, tenemos jornadas con ilustres chefs invitados como Yaron Traub, Jordi Savall, Sakari Oramo, Albert Alcaraz, David Grimal, Maximiano Valdés, Sylvain Gasançon o Ylich Rivas.
Estos maestros de la dirección artística y de la elaboración de nuestras sugerencias vendrán acompañados de violinistas como Inmo Yang, Manfredo Kraemer, Albert Alcaraz, David Grimall, Soyoung Yoon; chelistas como Beatriz Blanco; pianistas como Javier Perianes o las Hermanas Labèque, cantantes líricos como José Antonio López, Berna Perles, Cristina Faus, José Luis Sola o David Menéndez; guitarristas como Pablo Sanz Villegas y los profesores de la sección de trompas y metales de la OSRM.
Nuestro menú se adapta a todos los apetitos y ustedes pueden ya hacer sus reservas para degustarlo de manera completa o parcial. Lo importante es que, un año más, el Auditorio Regional sea la gran casa de la música clásica donde nos veamos todos. La presencia de Don Octavio permanecerá en cada esquina del edificio que vio construir aportando sus sugerencias tan sabiamente dirigidas a priorizar la acústica y el escenario sobre lo demás. Parte de su eterno legado habita en este singular templo de la cultura.
