El mejor Alcaraz, ante la sorpresa de Wimbledon

Wimbledon entra en ebullición, en su fase más caliente. Ya solo quedan ocho tenistas -en el cuadro masculino- en el camino hacia el título del tercer Grand Slam del año. Entre ellos está, como no podía ser de otra manera, Carlos Alcaraz. El murciano aterriza en los cuartos de final en su mejor momento sobre la hierba de Londres, pero tendrá que demostrarlo esta tarde (sobre las 17.00 horas) ante el británico Cameron Norrie.

El de El Palmar llega crecido, tras una brillante remontada frente a Andrey Rublev (6-7,6-3, 6-4 y 6-4) en la que asombró a todos con un servicio certero. El pupilo de Ferrero estuvo soberbio al saque -logró 22 aces y superó por primera vez en Wimbledon el 80% de puntos ganados con el primer saque- y volvió a dejar varios puntos para la galería en una declaración clara de que está mejorando partido a partido.

Hoy tendrá al otro lado de la red a la sorpresa del torneo. Cameron Norrie lleva un año gris, con casi las mismas derrotas que victorias, y pocos se esperaban que el número 61 del ranking apareciera como antepenúltimo obstáculo del murciano. Aún así, el tenista británico entrará hoy a la pista central con la moral por las nubes, sobre todo después de la extraordinaria, y sudada, victoria ante el chileno Nicolás Jarry en cinco sets (6-3, 7-6, 6-7, 6-7 y 6-3). Una dura batalla que se metió en el bolsillo para regalarse unos cuartos ante el favorito.

Antes, Norrie superó al italiano Mattia Bellucci, al norteamericano Frances Tiafoe y a otro español, Roberto Bautista, para terminar accediendo a la mejor ronda de un gran torneo de todo el año. Llega crecido, pero no debería ser un problema para Carlitos Alcaraz. Si el de El Palmar mantiene su nivel mostrado en los octavos y se mantiene estable mentalmente, el camino se despejaría pronto para mirar con ilusión otra semifinal.

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