Lola Martínez-Pons en el Centro Nacional de Arte y Cultura Georges Pompidou de París. Cedida

El arte, el gusto y lo bueno: la estética filosófica en la probeta

La investigadora de la Universidad de Murcia Lola Martínez-Pons busca desentrañar en su tesis doctoral el modo en que nos relacionamos con las obras que nos encantan, gracias a una beca de posgrado concedida por la Fundación Séneca, organismo dependiente del Gobierno regional

Sábado, 21 de junio 2025, 07:34

No es posible haber visto la película que ganó el Oscar en 2023, 'Todo a la vez en todas partes', y no acabar entablando un ... debate con algún prójimo sobre si «es una ida de olla o, por el contrario, una genialidad». Que nos parezca una u otra cosa es una cuestión de gusto personal, claro, pero, aunque así lo creamos, no solo es una cuestión de deleite propio. También entra en juego «lo que nos parece bueno y valioso al margen de nuestro gusto particular».

Publicidad

Los entrecomillados son de la investigadora Lola Martínez-Pons Ortuño, que se ha propuesto «prestar atención al modo en que nos relacionamos con el arte (música, literatura, cine, pintura…) y, especialmente, al valor que le damos en nuestra vida cotidiana». La especialista del Departamento de Filosofía de la Universidad de Murcia (UMU), cuenta con una beca de la Fundación Séneca (entidad dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor) para poner en la probeta de estudio una de esas cuestiones metafísicas que acompañan al ser humano desde que pergeñó la idea de arte: «Identificar en qué nos fijamos exactamente, a qué le damos más importancia y en qué nos basamos cuando, por ejemplo, decimos que 'La mala costumbre' de Alana S. Portero es una novela maravillosa». Al menos lo es para Martínez-Pons, que ilustra la idea con su opinión sobre esta novela española de 2023 traducida a casi una veintena de idiomas.

Las claves

  • Ante los medios de comunicación. Su proliferación ha multiplicado la crítica de arte, y con ella la idea de que el gusto personal no debería influir tanto en nuestra opinión sobre el valor que damos a las obras

  • Al margen del gusto. En realidad, lo que nos resulta bueno y valioso también apunta a influir en nuestras preferencias en el arte.

  • Romper una brecha. La investigación propone romper la brecha entre estas teoría y práctica y conciliar el modo en que, de hecho, nos relacionamos con el arte en nuestra vida cotidiana.

Comportamiento opuesto

La especialista explica cómo, con la proliferación de los medios de comunicación, la crítica de arte se ha multiplicado y, con ella, «la idea de que nuestro gusto personal no debería influir en nuestras consideraciones sobre el valor que tienen las obras de arte». Sin embargo, afirma, «en nuestro día a día nos comportamos de manera opuesta: si algo nos gusta, consideramos que es bueno; y viceversa». Su investigación trata de romper esta brecha entre teoría y práctica «conciliando el modo en que supuestamente deberíamos relacionarnos con el arte y el modo en que, de hecho, lo hacemos en nuestra vida diaria».

La UMU es, de hecho, «la única que oferta formación e investigación en filosofía»

En torno a este objetivo Martínez-Pons está elaborando su proyecto de tesis doctoral. La investigación, bautizada con el título de 'Entre el gusto y la interpretación: la evaluación de las obras de arte', no sigue los manejos acostumbrados de las ciencias, lógicamente. La filosofía es un saber holístico, en el que todo está interconectado e influye entre sí. «En filosofía el trabajo es bastante autónomo», explica la estudiosa.

Publicidad

Al tiempo que apunta la necesidad de contar con alguien que supervise su trabajo (su directora de tesis es la catedrática de Estética y Teoría de las Artes de la UMU Francisca Pérez Carreño) y de un grupo de investigación en el que asociar en un proyecto más general el individual emprendido, Martínez-Pons destaca cómo, «al final, la tarea de leer, pensar y escribir sobre tu propia investigación es algo de lo que sólo puedes encargarte tú».

También entra en juego «lo que nos parece bueno y valioso al margen de nuestro gusto particular», explica la filósofa investigadora Lola Martínez-Pons

En este caso, del área en el que se ha adentrado la filósofa (gracias a un contrato predoctoral de la Fundación Séneca que arrancó en marzo de 2023 y durará tres, o quizá cuatro, años) no se está ocupando más que su facultad en la Región de Murcia. La UMU es, de hecho, «la única que oferta formación e investigación en filosofía»; y el grupo de la investigadora, denominado Aresmur-Estética y Teoría de las Artes, aventura, «creo que ocupa un lugar primordial en la investigación en estética», que es la disciplina que estudia la belleza y los fundamentos filosóficos del arte.

Publicidad

Elevando la mirada a nivel nacional, sí existen «múltiples investigadores y docentes de distintas instituciones españolas», revela, que forman «parte de la Sociedad Española de Estética y Teoría de las Artes (SEyTA), creada en 2014 para promover la actividad investigadora en nuestro campo».

La Universidad de Barcelona, la de Granada y la UNED, entre otros centros, están desarrollando en los últimos años proyectos en esta área. Sin embargo, advierte la futura doctora, «la metodología y el enfoque adoptados en la investigación en estética varía mucho en cada caso». Sí se limita el espacio a lo que Martínez-Pons denomina «investigación en estética analítica, la cual se centra especialmente en el análisis de los conceptos y argumentos utilizados en la disciplina, entonces el grupo Aresmur es líder en España».

Publicidad

Paradoja alemana

Un paso más allá, en la esfera internacional, ya encontramos «numerosas redes y sociedades de investigadores en estética, como la European Society for Aesthetics (ESA), la British Society of Aesthetics (BSA) o la American Society for Aesthetics (ASA)». La experta cita los «muy interesantes» grupos de investigación en estética que existen en universidades italianas, como la de Turín o Génova; en Suecia, concretamente en Uppsala (Suecia), en Warwick (Reino Unido) y Auburn (en el Estado norteamericano Alabama). Aunque lo más común, siguiendo esa tendencia al trabajo autónomo de los filósofos a la que antes se refería, es «encontrar investigadores sueltos más que un grupo cohesionado». Abundan especialmente las iniciativas en el marco de universidades y centros culturales alemanes, donde «se trabaja mucho en estética». El estricto método germano también se proyecta en los conceptos subjetivos de lo artístico: una paradoja también digna de estudio.

Antigua estatua romana expuesta en el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles (Italia). LMPO

Un entorno más igualitario y con arte

Cuando la investigadora del Departamento de Filosofía de la Universidad de Murcia Lola Martínez-Pons estudió filosofía (su edad apenas llega al cuarto de siglo, por lo que hablamos de ayer mismo) las asignaturas de estética eran las que más disfrutaba. «Además, las encargadas de impartir las asignaturas (Francisca Pérez Carreño, María José Alcaraz y Matilde Carrasco) eran de las pocas profesoras mujeres que en su momento había en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Murcia». El grupo de investigación de estas especialistas, conocido como Aresmur-Estética y Teoría de las Artes, «del que también era y es parte fundamental el profesor Salvador Rubio, ofrecía un espacio igualitario que me hizo sentir muy cómoda y bienvenida».

La investigadora aclara que no hay que confundir el significado de la palabra estética fuera del mundo académico con el que emplean en su área. En ella se denomina así a «la rama de la filosofía que estudia la apreciación estética de los objetos». De manera más sencilla, estética es el modo en que se alude a la filosofía del arte, «del mismo modo que hay filosofía de la ciencia, del lenguaje, filosofía política… y así con todos los ámbitos del saber». Es un área en la que Martínez-Pons se siente especialmente acogida: «Siempre he disfrutado y conectado mucho con el arte, especialmente con la música, así que investigar en estética satisface una curiosidad no sólo profesional sino también personal».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Prueba LA VERDAD+: Un mes gratis

Publicidad