Tres diseños contemporáneos que dialogan con el paisaje

En Bodegas Barahonda (Yecla), el edificio se presenta como una caja elevada que flota sobre los viñedos. Su diseño contemporáneo de líneas puras y materiales sobrios se integra con el entorno, al tiempo que ofrece vistas panorámicas desde el restaurante acristalado, potenciando la experiencia sensorial del visitante.

En Casa Rojo (Jumilla), la arquitectura responde a un concepto más narrativo e innovador. El conjunto destaca por su lenguaje industrial refinado, con volúmenes limpios, espacios abiertos y una cuidada estética que convierte la bodega en un contenedor de creatividad. La disposición de los espacios interiores permite un recorrido fluido que acompaña el proceso del vino desde el campo hasta la botella, reforzando la idea de un vino con identidad propia.

Por último, Viña Elena (Jumilla), conserva una escala más doméstica y cercana, reflejo de su arraigo familiar. Aquí la arquitectura no busca imponerse, sino acompañar. Las instalaciones combinan tradición y funcionalidad, con estructuras sencillas y materiales honestos que dialogan con el territorio. La última reforma de estas bodegas resultó ganadora del Premio Regional de Arquitectura de la Región de Murcia en el apartado de Rehabilitación y Restauración.