Secreto en adobocon melón

Ya saben que lo de llamar 'secreto' a esta pieza del cerdo viene de que, antiguamente, los carniceros y matarifes se guardaban esto trozo de carne para sí, para comérselo a la plancha con sal. Es un corte que se localiza entre la paletilla y la panceta que es especialmente sabroso. Si es ibérico, más, claro. Hoy les propongo una receta de carne fresca, apropiada para el picoteo veraniego: cortaremos el secreto en pequeños escalopines, pero atención, hay que respetar una regla o la carne se nos quedará dura: perpendicularmente a la fibra muscular. Dicho esto, mezclamos todos los ingredientes del adobo (el aceite es simplemente un chorrito para ligar la mezcla) y untamos los escalopines con ella. Ponemos la carne en un táper bien apretada y el resto del adobo por encima y tapamos con papel film. Al frigo antes de irnos a dormir. Al día siguiente, secamos con cuidado los escalopines con papel de cocina. Los pasamos por una sartén con unas gotas de aceite vuelta y vuelta, tienen que quedar jugosos. Los disponemos en una fuente, junto con trocitos de melón rosa alrededor (el contraste entre la fuerza del adobo y la fruta es delicioso). Y por encima de los filetitos de secreto pondremos una picada de pimienta verde, perejil y aceitunas, ligada con un chorrito de aceite.