Cómo quitar los arañazos de la vitrocerámica con un solo producto

Son muchos los que han optado por poner vitrocerámica en sus hogares, ya sea por comodidad o por las ventajas que aporta este sistema de cocina. Este se basa en la generación de calor por medio de unas resistencias eléctricas situadas bajo el cristal vitrocerámico y entre sus cualidades se pueden encontrar la manera progresiva que tiene para calentar la comida, que acepta todo tipo de recipientes o conserva bien el calor residual.

Otro de los motivos por el que la vitrocerámica desbancó por completo a las tradicionales cocinas de gas también es su limpieza. Al ser una superficie lisa, es muy fácil eliminar los restos de comida y salpicaduras. Sin embargo, si no la mantenemos de manera adecuada y la descuidamos, esta se puede ver afectada y perder su brillo tan característico, así como la aparición de arañazos.

Si bien, la vitrocerámica tienen ofrece muchos beneficios, el material con el que está fabricado puede ser propenso a rayarse. Es por ello, que hay que tener mucho cuidado con su limpieza y utilización. Usar estropajos o elementos punzantes o no retirar los restos de comida, son algunas de las prácticas que pueden alterar su aspecto. Sin embargo, existe un truco casero para conseguir que tu placa vuelva verse como nueva.

Este truco sirve para eliminar estas marcas, pero solo en aquellos casos en los que se trate de pequeñas rozaduras o raspones y no de golpes fuertes o roturas. Este 'tip' lo ha compartido Maribel Mendoza, más conocida como eltallerdefiti_ en Instagram. Para ponerlo en práctica solo necesitarás pasta de dientes, en concreto ella utiliza con bicarbonato, pero según aclara cualquier otro tipo también sirve, y un paño de microfibra.

La pasta de dientes es una buena aliada para eliminar los arañazos superficiales, ya que sus componentes tienen un efecto muy similar al de un pulidor y disimula este tipo de imperfecciones en este tipo de superficies acristaladas. Es por ello que también se recomienda su uso para pulir los faros del coche, por ejemplo.

Antes de aplicar la pasta de dientes, tendrás que asegurarte de que está totalmente limpia. Luego solo unta el dentrífico por la vitrocerámica y extiéndelo por toda la superficie con la bayeta de microfibra. Dejalo actuar durante dos minutos y retíralo con un paño húmedo. Por último, seca bien la vitrocerámica.

En estos casos, también puede ser efectivo utilizar bicarbonato de sodio y agua, pues tendrá un efecto muy similar al de la pasta de dientes. Crea una mezcla con estos dos productos y remuévela bien para evitar que queden grumos y aplica con una bayeta haciendo movimientos circulares. Limpia con un paño seco y limpio para quitar el exceso.

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