La orden de la DGT a la Guardia Civil tras bajar los límites de velocidad

El objetivo de la Dirección General de Tráfico (DGT) de reducir el número de accidentes mortales en nuestras carreteras pasa, según El Confidencial, por la puesta en funcionamiento de 40 radares más coincidiendo con el nuevo límite de velocidad en las carreteras convencionales, 90 kilómetros por hora.

«Debemos acercarnos un poco a lo que son los estándares europeos. En Reino Unido hay 7.000; en Francia, 4.000; en España hay mil. En Holanda, que debe ser como Aragón, hay 800», afirma Pere Navarro. La mayoría de estos nuevos 40 radares se instalarán en carreteras convencionales.

«Los radares fijos siempre han sido visibles con un gran cartel y aparecen en todos los navegadores. El objetivo principal es que tú levantes el pie del acelerador y cumplas el límite de velocidad, nada más», argumenta Navarro en contra de las afirmaciones que destacan el carácter recaudatorio de estos dispositivos. Además ha destacado la efectividad de los radares: «hay tramos en los que tenemos accidentes, colocamos estos nuevos radares y desaparecen todos los accidentes».

A estos nuevos 40 radares se añaden los 200 radáres veloláser, muy pequeños e imposibles de detectar. Miden velocidades superiores a 250 km/h, diferencian entre carriles y sentidos dentro de una carretera y pueden activarse sin la presencia cercana de una patrulla.