Tres meses de prisión a un camionero drogado que huyó durante 70 kilómetros

Los agentes de ese municipio, que seguían al tráiler por la autovía A-30, en dirección Albacete, reclamaron la ayuda de la Guardia Civil de Tráfico, que movilizó a las dotaciones que en ese momento tenían por la zona. La persecución se prolongó seguidamente por la autovía A-33, dirección Yecla, y más tarde por la N-344, hacia Fuente la Higuera.

Durante todo ese trayecto, a lo largo de dos horas, el camionero condujo el vehículo articulado con grave riesgo no solo de su propia vida, sino de los agentes que iban tras su rastro y del resto de los usuarios de la calzada, pues en muchos momentos iba haciendo zigzags para evitar que las patrullas pudieran interceptar su marcha.

Fue ya en el término de Yecla donde se sumaron al operativo varias dotaciones de la Policía Nacional, que colocaron un control en la carretera y extendieron sobre la calzada una cadena con pinchos, con el fin de obligarle a detener la marcha. Pero ni de esa forma aflojó el ritmo y, aun después de reventar varios neumáticos, el conductor continuó su huida.

En un momento dado, un policía local de Archena logró encaramarse hasta la cabina y rompió la ventanilla del conductor, pero, debido a un nuevo acelerón del vehículo y a los bandazos que seguía dando, tuvo que saltar. Finalmente, fueron un guardia civil y un policía local de Yecla quienes lograron penetrar en la cabina y reducir al camionero, aunque el vehículo se acabó saliendo de la calzada y estrellándose contra una valla.

Incluso en ese momento, el protagonista siguió presentando resistencia a ser arrestado.

Cinco años más tarde, hace apenas unos días, R. O. M. se vio ante el juez con una petición de penas de nueve años de prisión por presuntos delitos de conducción bajo los efectos de las drogas, atentado, desobediencia y conducción temeraria. Sin embargo, las negociaciones desarrolladas por su letrado, Raúl Pardo-Geijo Ruiz, acabaron permitiendo que la pena se quedara finalmente en tres meses de prisión y privación del carné de conducir por un año. En ello influyó el hecho de que el acusado hubiera aportado previamente casi 30.000 euros para cubrir la responsabilidad civil, lo que permitió la aplicación de la atenuante de reparación del daño, y que el procedimiento hubiera sufrido dilaciones injustificadas, lo que también derivó en una relevante atenuación de las penas inicialmente solicitadas.