«Las trabajadoras del sexo se quedarán en una situación de vulnerabilidad extrema»

Desde la asociación critican que lo que el Partido Socialista quiere es meter en la cárcel a todas aquellas personas que se lucran de alguna manera con esta actividad: dueños de clubes, propietarios de pisos donde se ejerce la actividad, pero también a la prostituta que figure como titular del contrato de alquiler. «Puede darse el caso de que un grupo de chicas alquile una casa para trabajar, y una de ellas, la que figure en el contrato, pueda ser detenida», aclara Pardo.

En este sentido, desde la asociación CATS advierten de otras consecuencias, ya que habrá dueños de casas que no las alquilarán a mujeres que ellos crean que son prostitutas. «Muchos caseros se negarán a arrendar viviendas a mujeres brasileñas, colombianas, rumanas... Solo por sospechas de que son trabajadoras del sexo, y aquí entra en juego la discriminación racial y por país de procedencia».

Además, el comité de apoyo a las prostitutas lamenta que la reforma legislativa del PSOE no incluya otra batería de medidas para ofrecer alternativas a las trabajadoras que se van a ver sin trabajar y sin ingresos. «De un día para otro, muchas mujeres se van a encontrar en una situación de vulnerabilidad extrema, un caldo de cultivo perfecto para la proliferación de las mafias, que se aprovecharán de ello».