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Juan Carlos Escotet Rodríguez, presidente de Abanca, impartió la conferencia inaugural en el foro Avanza, el pasado jueves. FOTOS: Javi Carrión / EFQ
Info y Amefmur

Lecciones que refuerzan el papel vertebrador de la empresa familiar

El foro Avanza reúne a casi 300 empresarios y directivos en Murcia para abordar asuntos como la elección entre liderazgo externo o de la casa, el relevo generacional y la retención de talento

Sábado, 28 de septiembre 2024, 08:02

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En la Región de Murcia, el peso de las empresas familiares supera a la media nacional. Sólo las 30.900 compañías de esta naturaleza instaladas en la Comunidad aportan el 70% del PIB regional y generan el 85% del empleo privado, datos que superan en más de diez puntos a la media española. Además, el 92% de las entidades que aglutinan el tejido productivo regional son familiares, lo que refleja su fortaleza, arraigo e impacto dentro de la economía regional.

«Somos empresas responsables, competitivas, comprometidas, innovadoras, flexibles y capaces de anticiparnos a los retos del mercado global», describió José María Tortosa, presidente de la Asociación Murciana de la Empresa Familiar (Amefmur), en el discurso de bienvenida del cuarto foro Avanza. Organizado por el Instituto de Fomento (Info) y la mencionada Amefmur, el evento se celebró el pasado jueves en el Auditorio Víctor Villegas, en Murcia.

«Vosotros sois un ejemplo excelente», exclamó refiriéndose a los casi 300 empresarios, directivos y profesionales que asistieron a este encuentro anual que ya se ha convertido en una cita ineludible para el sector. Insistió, nuevamente, en la reducción del impuesto municipal de plusvalía y finalizó su intervención presumiendo de que «podemos confiar en los empresarios familiares».

Una visión que, acto seguido, compartió el presidente del Gobierno regional, Fernando López Miras, quien, en su discurso de inauguración, se refirió a los presentes como «puentes de tradición y transformación, puentes de generaciones, y puentes que unen y preservan». Remarcó el compromiso de su Ejecutivo con esta actividad, «que crea riqueza a partir de valores, misión y compromiso, y deja una huella indeleble en la sociedad».

Al respecto, subrayó algunos de las actuaciones que la Comunidad Autónoma ha puesto en marcha con el propósito de remar a favor del sector, como la inminente aprobación de la cuarta ley de simplificación administrativa, la rebaja de la presión fiscal, la escucha activa a las necesidades de empresas y emprendedores, el impulso a la innovación y sostenibilidad, y la elaboración del nuevo Plan Industrial, entre otros.

Una década de despegue

Con más de 900 puntos de venta en la Península Ibérica, una plantilla de más de 8.000 profesionales y un volumen de negocio que supera los 124.000 millones de euros, Abanca es el séptimo banco en España y Portugal. En solo una década, la entidad ha experimentado una evolución exponencial, tanto orgánica como inorgánicamente, multiplicando por 2,1 su volumen de negocio, por 3,2 su margen financiero y por 1,6 sus gastos de explotación.

Sin duda, un caso de éxito que su presidente, Juan Carlos Escotet Rodríguez, expuso en la conferencia inaugural titulada 'La transformación de la empresa familiar en contexto de cambio'. Hizo un repaso de los 38 años de crecimiento del grupo bancario venezolano que en 2014 adquirió la actual Abanca, siendo esta su segunda operación en España, tras el Banco Etcheverría. «Fue clave en nuestra expansión internacional; pero lo hicimos en el peor momento, con la prima de riesgo por encima de los 600 puntos», rememoró, agregando que «cuando hicimos esta apuesta, siempre tuvimos como misión el largo plazo, dado que nuestra política tiene la visión de construir valor».

En la actualidad, Abanca tiene una cuota de mercado superior al 40% en Galicia, donde es la entidad de referencia. «Hemos convertido un banco intervenido en uno de los perfiles financieros más sólidos del sistema financiero español», destacó Escotet, quien recalcó su presencia internacional con actividad en once países y una red que permite atender a todo el territorio. La entidad, cuya actividad se planifica a tres años vista, se rige por el seguimiento y cumplimiento de objetivos a través de un mapa con más de 900 indicadores de control de gestión. «Siempre tenemos presente el concepto de empresa familiar, pensando en el largo plazo y manteniendo el control de la propiedad», señaló.

Fuegos que encender

La entrevista que Ginés Clemente, presidente ejecutivo y fundador de Aciturri Aeronáutica, concedió a Eduardo Estévez, director de la Asociación de Empresa Familiar de Castilla y León, comenzó con la exposición, en el pantalón del escenario del foro Avanza, de dos imágenes separadas por 47 años de diferencia. En una aparecía el gallinero donde Clemente inició su proyecto empresarial y en la otra, una de sus instalaciones actuales. «Me sugiere toda una vida de lucha, ilusión, éxitos, fracasos, querer crear valor y poner los intereses de la empresa por delante de cualquier interés personal», relató. Ahora, aquel negocio que echó a andar con tres máquinas y un solo trabajador factura 500 millones de euros y da empleo a 3.000 personas.

Habló sobre el punto de inflexión que marcó la pandemia de Covid-19 en la compañía a nivel de facturación, que sigue sin recuperar las cifras de 2019. Eso sí, destacó la iniciativa de su equipo humano de diseñar y fabricar batas protectoras a partir de material auxiliar plástico de alta resistencia que se usa en el sector aeronáutico, para su distribución altruista a residencias de mayores y centros de salud. «Fue una lección de vida», comentó, para a continuación reseñar que «tenemos motivos para ilusionar a nuestra gente, que es el activo más importante de la empresa».

Sobre su única hija, que ocupa el cargo de consejera delegada de Aciturri Aeronáutica, dijo tener «mucha suerte», y lo ejemplificó con la decisión que ella tomó de «echar el pie hacia adelante» para ampliar las líneas de negocio, abarcando a día de hoy el diseño, fabricación y servicio de atención al cliente de aeroestructuras, sistemas y componentes de motores para aviones. «Nuestros hijos no son pozos vacíos, sino fuegos que tenemos que encender», aconsejó a los padres. Al hilo, lanzó un mensaje optimista a los jóvenes: «Nada es imposible; hay que trabajar mucho y creer en tu propio proyecto, para que ninguno se quede sin desarrollarse por miedo».

Caras conocidas y ajenas

La primera mesa redonda, moderada por Antonio Ballester, vicepresidente y consejero delegado de Terrapilar, planteó el debate sobre si el liderazgo de una empresa familiar debe recaer en manos externas o lo debe asumir un perfil de la propia casa. En Antolín, grupo empresarial del sector de proveedores de automoción, y Eurofirms Group, especializada en recursos humanos, los CEO no pertenecen a sus familias, porque así lo recoge el protocolo en el primer caso y por querer tener un equipo de primera división en el segundo. Sin embargo, Grupo Hogar sí apuesta por la cantera de su legado, eso sí, anteponiendo siempre los intereses empresariales a las decisiones emocionales. «Si hay un miembro de la familia que no aporta, está la poda», afirmó Víctor Nogueira, presidente de este grupo, refiriéndose a que se les aparta de sus funciones: «No puede suponer un problema para el desarrollo empresarial». «Nosotros lo hemos hecho y no ha supuesto ninguna ruptura del vínculo familiar; seguimos queriéndonos mucho y tomándonos nuestros vinos», asintió.

El protocolo que rige la gestión de Antolín se cumple a rajatabla; tanto, que María Helena Antolín, vicepresidenta de la CEOE, abandonó a principios de este año sus funciones directivas y también el consejo de administración. «Miramos por la salud de la empresa», justificó en alusión a la fuga de talento familiar a otras organizaciones por no poder desempeñar su función en el negocio familiar. «Para evitar conflictos, cortas por lo sano y no hay para nadie, aunque nos estemos perdiendo gente capacitada», apostilló. Por su parte, Miquel Jordá, presidente de Eurofirms Group, compartió el argumento de Ginés Clemente que anima a «encender el fuego» de las nuevas generaciones para que lleguen con fuerza a la empresa. «Es una gran prioridad prepararlas para que sean accionistas responsables», defendió, indicando que «si no percibes pasión y curiosidad, tienes que tomar la decisión de apartarlos por la sostenibilidad de la empresa».

Las personas, lo primero

El talento joven tomó la palabra en la segunda mesa redonda, donde hablaron de 'El mundo que queremos' junto a Marta Beltrán, directora de la Asociación de la Empresa Familiar de Madrid. Ester Cerdán, CEO y confundadora de la firma de moda Laura Bernal, disertó sobre el liderazgo incluso, el que predica en su empresa con la implantación de medidas como la flexibilidad horaria, entre otras. «En mi plantilla, el 80% son mujeres, y todas ellas son madres», presumió. En Vicky Foods, que comercializa sus productos bajo las marcas Dulcesol, BePlus y Horno Hermanos Juan, el liderazgo se extiende de manera capilar por todo el organigrama, tal y como se refleja en los equipos de trabajo autogestionados que sacan adelante los proyectos. «Así la gente se siente empoderada y los grupos están más cohesionados», aseguró Pablo Juan, director de Organización Industrial del grupo.

Marcelo Montilla, director de Estrategia de Grupo Atlántica, referente en nutrición, bioestimulación y bioprotección vegetal, defendió el factor humano de su plantilla: «Necesitamos gente capacitada, abierta, humilde, que quiera aprender y que reconozca sus errores». Indicó que, a raíz de la caída en ventas que la compañía registró un ejercicio, le permitieron introducir sus ideas para transformar la empresa desde dentro, consiguiendo empoderar a las personas e impulsar el cambio al estilo 'cadena de favores'.

Sonó Tina Turner

La periodista Azucena Marín, que ejerció de presentadora del foro Avanza, cerró esta cuarta edición con la conferencia motivacional titulada 'Efectos secundarios de las palabras', acompañada por la compañía murciana Belter Souls, que puso la parte musical a lo largo de su intervención. Con su particular alegría, afirmó que «las palabras son armas poderosísimas que nos cambian la vida y que deberían venir con un prospecto». Por ello recomendó utilizar las adecuadas para hacer una comunicación efectiva, administrarlas con empatía y una sonrisa, «que no sea falsa», y evitar las que son como cebollas, «esas que cada vez que las dice, llora alguien». «Depende de nosotros el poder elegir las palabras adecuadas para que construyamos y confiemos en vuestra mejor versión», recetó mientras sonaba el tema 'The best' de Tina Turner.

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