Un informe señala a la sanidad regional como la segunda con «peores servicios»

El sistema sanitario de la Región es el segundo con «peores servicios» de España, según el último informe de la Federación de Asociaciones para la defensa de la Sanidad Pública (FADSP). Con 61 puntos sobre 126 evaluables, lejos de la media (76,88) y más todavía de Navarra, en cabeza con sus 102 puntos, la Región solo se encuentra por delante de Canarias (56 puntos). Estos datos significan que la sanidad regional ha caído dos puestos desde que la FADSP elaboró su informe anterior, el año pasado, cuando su posición era la cuarta por la cola.

Como en estudios anteriores, son la ratio de profesionales por habitantes, el porcentaje de penetración de los medicamentos genéricos (31%, el más bajo del país) y el gasto medio por habitante (1.305 euros) lo que lastra a la Región. Para elaborar su informe, la FADSP ha utilizado datos de los ministerios de Sanidad y Consumo, y Hacienda, así como el Barómetro Sanitario del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

Como en sus anteriores ediciones, la FADSP señala en sus conclusiones que «se sigue evidenciando una gran disparidad en los servicios sanitarios entre las comunidades autónomas, que no se reduce, lo que pone en peligro la necesaria cohesión y equidad entre territorios».

La mayoría de datos recogidos son de 2018, aunque también hay algunos de 2017 y 2019. La paradoja, en el caso de la Región, es que los datos de médicos y enfermeros especializados por cada mil habitantes, así como los de facultativos de Atención Primaria y la media de días de espera para una intervención quirúrgica, son cifras más positivas que las del estudio anterior. Aún así, insuficientes, porque el resto de comunidades también se han puesto las pilas y han mejorado sus servicios. Tanto que, a pesar de los esfuerzos por proporcionar una mejor atención, Murcia ha caído en el 'ranking'.

El año pasado, el informe recogió que la Región tenía 2,92 enfermeros especializados por cada mil habitantes, situándose como la tercera comunidad con menor tasa. En esta ocasión, señala el documento, la sanidad regional tiene una ratio de 3,15 de estos profesionales por cada mil ciudadanos, pero sigue en la misma posición. Una por debajo todavía se sitúa la ratio de médicos especialistas (1,79), la segunda peor del país, solo por delante de Andalucía.

Un poco más ha subido el dato de médicos de Atención Primaria, que en 2018 se situaba en 0,69 por cada mil habitantes y este año está en 0,75. Sin embargo, la tasa mantiene a la Región, igual que en el año anterior, como la sexta con menos dotación de médicos de familia y pediatras.

Los que también han mejorado respecto al informe anterior, en descenso, son los datos de días de espera para una consulta con el especialista, cuya media pasa de 64 a 53 días, y la media de demora para una operación quirúrgica, que pasa de 96 a 82 días -dato a fecha 31 de diciembre de 2018-. Sin embargo, otra vez vuelve a suceder lo mismo: aunque las cifras son mejores, la Región sigue cayendo entre las comunidades, pues en el informe anterior era la quinta y ahora aparece como la cuarta con mayores atascos para entrar a quirófano.No obstante, hay que señalar que las ratios varían en función de las características poblacionales de cada comunidad.En los últimos diez años, la sanidad murciana se ha mantenido en posiciones de cola en el informe de la FADSP. Fue la quinta con peores resultados desde 2009 hasta 2011; cayó dos posiciones hasta ser la tercera con mayores deficiencias entre 2012 y 2014, posición que volvió a repetir en 2016. El único dato destacable para la Región en este decenio fue el de 2015, cuando subió hasta la posición número once -séptima por la cola-. En definitiva, siempre ha mantenido, según la clasificación de la FADSP, servicios sanitarios «deficientes» o han sido de «los peores».

Según señala la federación, si se comparan las posiciones de este informe y el de 2015, «que evaluaría la evolución durante la pasada legislatura», se observa que, entre las comunidades gobernadas por el PP, «una mejoró su posición, tres empeoraron y dos se mantuvieron». Mientras, en los territorios gobernados por el PSOE, «cuatro mejoraron, dos empeoraron y tres permanecieron igual». Y entre los nacionalistas, «dos mejoraron y uno empeoró». Por tanto, cita el informe, «de ello parece deducirse que la evolución fue más positiva en los que no tuvieron gobiernos conservadores».