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Golpe al cultivo de marihuana en La Alberca, Espinardo y Casillas
Decenas de agentes de la Policía Nacional se han desplegado en torno a varios piso en el que se han intervenido unas 2.800 plantas de cannabis
La Policía Nacional asestó este miércoles una espectacular serie de golpes en cadena a las redes delictivas dedicadas al cultivo y distribución de marihuana, merced a una operación que se desarrolló a lo largo de buena parte de la jornada en las pedanías murcianas de La Alberca, Espinardo y Casillas. La operación se inició hacia las once de la mañana, cuando un numeroso grupo de agentes se desplegó en torno a un inmueble de la calle Lope de Vega de La Alberca, en las inmediaciones del cementerio Nuestra Señora del Rosario, en el que sospechaban de la existencia de un invernadero de interior de cannabis.
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Cuando los especialistas del Grupo de Estupefacientes de la Jefatura Superior de Policía entraron en la vivienda, acompañados del secretario judicial que llevaba la orden de registro, confirmaron que la información de la que disponían era totalmente acertada e intervinieron decenas de matas de marihuana. Los agentes abandonaron el inmueble con una decena de cajas en las que habían depositado el estupefaciente decomisado.
Fuentes próximas a la investigación apuntaron a que en la vivienda fueron sorprendidas dos personas en el momento del registro, que fueron imputadas por un delito contra la salud pública. Todo apunta a que se trataba de personas de escasa relevancia dentro de la red delictiva, pues serían las que tenían encomendada la vigilancia del invernadero.
Seguidamente, los especialistas de la Policía Nacional se dirigieron a Espinardo y El Palmar para desarrollar nuevas intervenciones contra cultivos de cannabis. Y la jornada finalizó en Casillas, hacia las siete de la tarde, después de haber efectuado otra serie de registros en domicilios que se habían convertido en invernaderos clandestinos.
Los datos globales del operativo demuestran la relevancia del golpe asestado a estas redes criminales con los seis registros efectuados, ya que los agentes de la Jefatura Superior decomisaron en torno a 2.800 plantas de cannabis sativa, nueve kilos de marihuana congelada para la producción de aceite de cannabis, unas 150 lámparas halógenas y una veintena de aparatos de aire acondicionado utilizados en el montaje de los invernaderos.
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El número de arrestados se elevó finalmente a siete, en su mayor parte españoles de entre 27 y 51 años de edad, aunque también fue detenida una mujer de origen gambiano, de 23 años, igualmente por presuntos delitos contra la salud pública. La operación continúa abierta y no se descarta que otras personas puedan ser arrestadas en relación con estos hechos.
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