Empleados de residencias se someterán a test al volver de las vacaciones

Los quince positivos que suman los brotes de los geriátricos Caser Alamedas (Lorca) y Orpea (Cartagena) son en su mayoría asintomáticos, según señaló ayer la vicepresidenta de la Comunidad y consejera de Política Social, Isabel Franco. «Todos están bien, no presentan síntomas» y solo un residente de Caser permanece ingresado en el hospital Rafael Méndez de Lorca porque, «por sus patologías, resulta conveniente un seguimiento detallado», dijo la consejera. Isabel Franco quiso trasladar «un mensaje de tranquilidad» a los familiares y usuarios de las 116 residencias de ancianos y de personas con discapacidad de la Región porque «las vacunas están funcionando, que es lo importante».

La vicepresidenta señaló que la situación actual en las residencias es «para estar muy atentos, pero no es alarmante», por lo que no está previsto de momento adoptar nuevas medidas de control en los geriátricos. Recordó que la semana pasada entraron en vigor nuevas normas revisadas y coordinadas con el Servicio Murciano de Salud y el Instituto Murciano de Acción Social (Imás) para marcar las pautas de convivencia dentro y fuera de las residencias de usuarios y trabajadores.

Además, desde el 29 de mayo existe una orden conjunta de las consejerías de Política Social y de Salud en las que se dictaron medidas como la necesidad de realizar test de antígenos o pruebas PCR a todos los trabajadores que se incorporen al trabajo tras sus vacaciones, que estén más de siete días fuera o que vengan a realizar sustituciones, aseguró Franco.

«Los protocolos de control, seguimiento y seguridad se están siguiendo y los de relaciones con usuarios con las visitas o salidas vacacionales también», dice la consejera, que afirma que «no existen reuniones extraordinarias ni documentos extraordinarios ni datos extraordinarios».

Para Franco, es «muy importante» que se hayan detectado los casos en las residencias pero, «fuera de eso, hay que recordar que estamos hablando de decenas de miles de usuarios y trabajadores» y que, «gracias al proceso de vacunación», no se detectó ningún positivo en los geriátricos en los últimos cuatro meses. Añadió que «esto nos induce a ser moderadamente optimistas en cuanto a los efectos que los contagios puedan tener en residentes y trabajadores».

La Consejería de Salud no informó ayer de nuevos positivos o ingresos en las dos residencias de mayores afectadas por los brotes de coronavirus.

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