El sospechoso de matar a su hermana a puñaladas en Churra se entrega a la Guardia Civil
Un familiar descubrió el cuerpo sin vida en la entrada del domicilio materno en medio de un charco de sangre
El sospechoso de asesinar a su hermana de varias puñaladas en el domicilio materno, en la pedanía murciana de Churra, se entregó este lunes por la noche en la Comandancia de la Guardia Civil de Murcia. Ante los agentes de la Benemérita reconoció haber apuñalado a su hermana e indicó que estaba muy arrepentido, según explican fuentes cercanas. El presunto agresor estaba siendo buscado por la Policía Nacional desde primera hora de la tarde después de que otra hermana encontrara a las 14.20 horas el cuerpo de Gloria, una vecina de la localidad de 47 años, con múltiples puñaladas en el abdomen, tórax y cuello.
Gloria visitaba a su madre, una persona mayor y dependiente, dos o tres veces al día. Acudía a la casa familiar para darle las medicinas, limpiar la vivienda, llevar la compra, preparar la comida y dejar lista la cena, para ella y para su hermano Paco, de 49 años y con problemas psicológicos, el segundo de siete hermanos, cuatro hombres y tres mujeres, quien se había instalado en la casa junto a la madre.
La relación de Paco con sus hermanos era difícil, sobre todo con la hermana pequeña, «a la que no podía ni ver, por envidia», comenta una vecina. Fue ella precisamente, la más pequeña, la que a las 14.24 horas de ayer descubrió el cuerpo sin vida de su hermana Gloria. Presentaba varias puñaladas, realizadas con un cuchillo de cocina, en el abdomen en tórax y el cuello, según fuentes cercanas a la investigación.
Estaba tendida en el suelo, en medio de un charco de sangre, entre el pasillo y el patio de la vivienda, situada en la calle Arizona de la pedanía murciana de Churra. Al dramático hallazgo le siguieron los gritos de dolor que resonaron en la calle. «Estaba en mi casa y empecé a escuchar alaridos de la hermana pequeña», recuerda Inma, una residente de la misma calle. Inmediatamente, la mujer avisó al Centro de Coordinación de Emergencias 112 para informar de que había encontrado el cuerpo sin vida de su hermana. Hasta el lugar se desplazaron investigadores de la Policía Judicial, miembros de la Científica y del Grupo de Homicidios, que activaron el protocolo por muerte violenta. La comisión judicial procedió al levantamiento del cadáver en torno a las 16 horas. La muerte a puñaladas de Gloria causó una gran conmoción en la localidad. Amigos y familiares acudieron al domicilio donde se vivieron escena de sufrimiento. «Si lo cojo, lo mato», clamaba uno de los hermanos.
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«Es una persona conflictiva»
Tras cometer presuntamente el crimen, Paco abandonó la casa subido en una bicicleta. «No tiene carné de conducir», explicaron los residentes, quienes apuntaron que es una persona conflictiva. Al parecer, se dirigió a Cieza donde vive un conocido suyo para contarle lo que había sucedido.
En ese momento, investigadores del Grupo de Homicidios iniciaron un dispositivo de búsqueda del sospechoso. A las 22 horas fue él mismo quien se entregó en la Comandancia de la Guardia Civil y poco después fue trasladado a la Jefatura de la Policía Nacional para tomarle declaración.
«Paco atormentaba a la más pequeña; ella le tenía miedo e intentaba evitarlo»
La relación de Paco con los hermanos no era buena, según los vecinos, y con quien peor se llevaba era con la menor de todos. «La pobre le huye porque él no la soporta. Le tiene miedo. Era una relación tormentosa». Fue ella, precisamente, la que encontró el cuerpo de Gloria.
«Cuando me he enterado de lo que ha pasado, creía que la víctima era la hermana pequeña. Pero me he quedado de piedra cuando me han dicho que la fallecida era Gloria», manifiesta Paqui, una residente. La víctima, que residía en una zona de dúplex en Churra, era la encargada de atender a la madre. Los problemas mentales de Paco influyeron en la supuesta agresión mortal, que estuvo precedida de un discusión entre los hermanos, según explican fuentes cercanas a la investigación.
