Penas mínimas al 'clan de La Loles' por blanquear el dinero de la venta de droga
Un acuerdo con la Fiscalía rebaja a un año de cárcel la pena impuesta a la responsable de uno de los 'garitos' de menudeo más conocidos de Murcia y a sus cinco hijos
Los principales integrantes del conocido 'clan de La Loles', responsable de uno de los chiringuitos de venta de estupefacientes más conocidos de Murcia, asumieron este martes haber blanqueado dinero procedente del negocio de la droga. Ese reconocimiento era el requisito ineludible para sellar un acuerdo que rebajó a una cuarta parte las penas de prisión a las que se enfrentaban.
Dolores M. S., 'La Loles', sus cinco hijos y a una nuera fueron condenados, en una sentencia 'in voce', a penas de un año de cárcel por blanquear el dinero obtenido de la venta de estupefacientes. Todos ellos afrontaban, en un inicio, peticiones de pena de cuatro años y cuatro meses de prisión. La fiscal, a la hora de sellar este pacto, tuvo en cuenta los importantes retrasos que ha sufrido esta causa, con paralizaciones diversas de hasta 22 y 16 meses de duración, y les aplicó una atenuante de dilaciones indebidas.
La sentencia contempla, asimismo, multas a todos los condenados de entre 100.000 y 45.000 euros -que en global suman cerca de medio millón de euros- que en global suman cerca de medio millón de euros- y el embargo de algunos de sus bienes. Los procesados se libran, sin embargo, de la pérdida de algunas fincas que inicialmente sí habían sido reclamadas por el Ministerio Público y que, al final, quedaron fuera del pacto.
Los procesados estuvieron defendidos por conocidos abogados penalistas como Pablo Martínez, Evaristo Llanos, Jorge Novella y José María Caballero, que solicitaron la suspensión de las condenas impuestas a los miembros del clan. El tribunal, al no negarse la Fiscalía, acordó la suspensión de las penas con el requisito de que los procesados no vuelvan a delinquir en el plazo de dos años. Pablo Martínez, que se encarga de la defensa de cuatro de los procesados, subrayó que «la causa se ha dilatado mucho. Fiscalía lo sabía y se ha alcanzado un acuerdo beneficioso para todas las partes».
Dolores M. S., 'La Loles', ya fue condenada en 2004 a dos años de cárcel por tráfico de drogas, según recogía la fiscal en su escrito de conclusiones provisionales. Destacaba, además, que esta mujer está vinculada policialmente a este 'negocio' desde mucho tiempo atrás, ya que fue detenida hasta en seis ocasiones por este motivo entre 1988 y 2004. Ella es presuntamente la mandamás de un clan dedicado al tráfico de drogas del que forman parte todos sus hijos. Este grupo controla supuestamente varias viviendas en el bloque III de la calle Santa Rita, en el murciano barrio de La Fama. Pese a la carencia de ingresos lícitos, la familia dispone de numerosos vehículos e inmuebles que hicieron saltar las alarmas e iniciar una larga investigación por blanqueo de capitales que finaliza con penas mínimas.
La familia tiene pendiente en mayo otro juicio por traficar con hachís y cocaína
El 'clan de La Loles' respiró ayer aliviado tras sellar un beneficioso pacto con la Fiscalía, pero aún tiene otro frente abierto. Esta familia debe afrontar, a partir del 17 de mayo, otra vista por presunto tráfico de droga. El Ministerio Público, en esta causa que se remonta a 2008, solicita para Dolores M. S., 'La Loles' hasta ocho años y cuatro meses de cárcel por supuestos delitos de tráfico de drogas, contra la administración de justicia y de coacciones. Reclama, además, que la mujer abone una multa de 110.000 euros.
En esa otra vista, que se prolongará durante varias jornadas, le acompañarán también en el banquillo algunos de sus hijos, que afrontan penas de prisión de entre cinco años y tres meses y once años y medio por otra larga retahíla de delitos.
Las investigaciones de la Unidad contra la Droga y el Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional que dieron origen a este caso se iniciaron a finales de 2008 al detectar un aumento de las medidas de seguridad en los pisos o 'caletas' tradicionalmente vinculados a este clan y ubicados en los bloques II y III de La Fama. Según explica el fiscal en su escrito de conclusiones provisionales, a mediados de febrero de 2009 se tuvo conocimiento de que uno de los hijos, Andrés L., había propinado una paliza a un hombre por una supuesta deuda de drogas que mantenía con la familia. La víctima denunció el ataque y explicó que era cliente del 'clan de La Loles'. Además, proporcionó supuestamente información sobre los domicilios de seguridad que usaba el grupo.
La Policía, tirando del hilo, destapó la existencia de una supuesta estructura criminal que contaba con personas dirigidas a diversas funciones, con 'garitos' de venta de droga y con un «adecuado aprovisionamiento», resalta el fiscal, de hachís y cocaína, entre otras sustancias. A la cabeza de esta estructura se situaba presuntamente La Loles, que había hecho del tráfico de drogas su forma de vida. El día de la redada principal la sospechosa, al parecer, no estaba en su vivienda y observó todo el despliegue policial desde un parque próximo.
