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Uno de los miembros de la Bandera Ortiz de Zárate III de la Bripac, ayer, emocionado al ser abrazado en su regreso de Mali.

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Uno de los miembros de la Bandera Ortiz de Zárate III de la Bripac, ayer, emocionado al ser abrazado en su regreso de Mali. antonio gil / agm

Misión cumplida en Mali

Un total de 150 militares de la Bripac regresan al cuartel de Javalí Nuevo tras formar desde mayo a las fuerzas malienses contra el terrorismo yihadista

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Miércoles, 28 de noviembre 2018, 02:41

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Primero se temió que el vuelo fuese desviado al aeropuerto de Alicante por las condiciones meteorológicas. Después se produjo un retraso respecto de la hora de llegada de las 20.30 a las 22.20. Y finalmente llegaron los besos y los abrazos emocionados de los familiares que aguardaban ayer, en el aeródromo de San Javier, el regreso desde Mali de 150 integrantes de la Bandera Ortiz de Zárate III, perteneciente a la Brigada Paracaidista (Bripac).

«Hemos pasado unos meses difíciles, porque sufrieron un atentado en la anterior misión en Afganistán, pero mi hermano nos decía que estuviésemos tranquilos», subrayaba ayer, nerviosa, Mari Carmen ante el regreso a casa del sargento primero Antonio Coy. Su hermano era uno de los 150 soldados del acuartelamiento de Santa Bárbara, en Javalí Nuevo, que han permanecido desplegados en Mali desde mediados de mayo, para participar en la Misión de Entrenamiento de la Unión Europea (EUTM). El objetivo era formar a los militares malienses en tácticas de infantería y manejo de explosivos contra las fuerzas insurgentes de terroristas yihadistas. «Hemos estado conectados con él toda la misión», admitía, aliviada, Mari Carmen.

Al sargento primero le esperaba en el aeropuerto toda su familia y amigos de Onteniente, así como su mujer e hijo, con los que ahora reside en Murcia, cerca del acuartelamiento. «En diciembre, su hijo cumplirá dos años y ha llegado a tiempo de celebrarlo». En la terminal resonaron los aplausos al aparecer los soldados de la Bripac con banderas de España. Los familiares se contaban por decenas y muchos de ellos acudieron pertrechados de globos con forma de corazón y pancartas, con mensajes de cariño para todos ellos: 'Bienvenido a casa', 'Ahora empieza lo bueno', 'Eres un campeón'...

Los efectivos de Javalí Nuevo desplegados en la misión de Mali estuvieron dirigidos por el teniente coronel jefe de la Bandera Ortiz de Zárate III de la Bripac, Ignacio González-Felgueroso, quien resaltó a 'La Verdad' que «todos han trabajado muy duro». El teniente coronel detalló que durante seis meses han operado como grupo táctico dando protección a las bases permanentes que la EUTM tiene en el país africano. También desempeñaron labores de escolta de los instructores que se desplazaron por distintas regiones para adiestrar a las fuerzas malienses. «Poco a poco las Fuerzas Armadas de Mali van tomando el control del país», valoró.

Pese a la dificultad de la misión, el mando tranquilizó a los familiares subrayando que desde su despliegue en mayo «no ha habido incidentes». Los soldados de la Bripac desplazados tendrán cerca de dos meses de permiso al no haber disfrutado de las vacaciones de verano.

Esta ha sido la primera vez que la Bandera Ortiz de Zárate III se despliega en Mali y se desconoce, de momento, si el Ministerio de Defensa los volverá a movilizar contra el yihadismo. Pero el teniente coronel zanjó: «Estamos preparados para lo que nos encomienden».

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