Terminan de derribar los edificios del cuartel de la Guardia Civil en Cartagena

La demolición de los edificios de la casa cuartel de la Guardia Civil de Cartagena, iniciada en septiembre, ha concluido a mediodía de este domingo, a excepción de las dependencias oficiales en donde hasta diciembre prestarán sus servicios los agentes. En el último mes del año está previsto trasladar el servicio al antiguo colegio Antonio Arévalo, en San Ginés.

Los vecinos del entorno de la casa cuartel de la Guardia Civil de Cartagena, ubicada en la calle Ángel Bruna, y próxima al parque de Los Juncos, despertaron este domingo con una intensa polvareda a causa de los trabajos de demolición.

«El parque está lleno de polvo, con una niebla inmensa desde las 8 de la mañana. Podrían haber respetado, al menos, el domingo, para que los niños puedan jugar tranquilos, ya que venimos sufriendo la situación desde el inicio de los trabajos», dijo Mar Vega, de la mano de su hijo Marco.

El presidente de la asociación vecinal Parque de los Juncos, constituida recientemente, José Luis Cerrolaza, remarcó la «indignación» de los residentes en esta zona del Ensanche.

Por su parte, La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) denunció «improvisación» en los trabajos de demolición. «Este fin de semana ha cerrado el acuartelamiento para derribar los tres bloques del patio exterior más próximos a las dependencias oficiales. Han mantenido a dos guardias civiles en peligro con varias grietas en una situación alarmante», aseguraron en un comunicado desde la asociación. El resto de servicios fueron trasladados a otras zonas.

AUGC lamentó que «ni han retrasado la demolición hasta que estuvieran todos los agentes fuera, ni han comenzado las obras en el Colegio Antonio Arévalo».

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