Vía libre a la obra en la red de alcantarillado que evitará vertidos a la rambla de Benipila, en Cartagena

Las obras tienen un periodo de ejecución de 18 meses. El equipo de gobierno espera tener listo en pocas semanas el proyecto para autorizar la disponibilidad de los fondos procedentes del superávit del servicio. Después será Hidrogea la que contrate una constructora, bajo la supervisión de los técnicos municipales. Así las cosas, los trabajos podrían comenzar a finales de este año y estar acabados a mediados de 2023. Al menos esa es la planificación que baraja la mercantil.

La instalación quedará unida al sistema actual de canalización de las aguas residuales por medio de una tubería soterrada bajo la rambla de Benipila, según informaron desde el Área de Infraestructuras del Ayuntamiento. Se pretende que la canalización se vea beneficiada por la gravedad, dada la diferencia de cotas y que la estación de bombeo estará a una profundidad similar a la que tiene el cauce.

La infraestructura que actualmente bombea estos desechos procedentes de los domicilios de gran parte del centro de Cartagena tiene 40 años. Cada vez hay más fallos y, conforme pase el tiempo, puede dar lugar a malos olores. Además, cuando hay lluvias torrenciales, queda de manifiesto su incapacidad para bombear a ritmo suficiente hasta las depuradoras y evitar que el agua caída vaya a parar al cauce de la rambla. En algunos de los últimos episodios, eso dio lugar a problemas en la desembocadura de la Algameca Chica. Asimismo, la antigüedad de los generadores empieza a causar un ruido que irá en aumento, indicaron desde el Palacio Consistorial.El proyecto de desmantelamiento de la estación de bombeo, junto a la comisaría de Policía, la convertirá en un mero nudo de tuberías «por el que ya no pasarán aguas residuales como hasta ahora, sino otras mucho más inocuas».

La nueva estación tendrá más potencia y también una mayor capacidad de impulsión y de retención de residuos líquidos. Funcionará con tecnologías limpias, además de incorporar maquinaria más silenciosa. Podrá ser gestionada mediante un control por telemando, lo cual garantiza un diagnóstico más ajustado de la capacidad de bombeo y de cualquier anomalía o avería que ocurra. Además, será eficiente energéticamente, lo cual permitirá rebajar el consumo de electricidad, con el consiguiente ahorro económico.

Gracias a estas mejoras, el sistema permitirá evacuar el agua de las alcantarillas de todo el ensanche hasta otra estación de impulsión ubicada en la rotonda de Severo Ochoa, como ya ocurre ahora, pero de una manera mucho más eficiente. El circuito va desde allí hasta otra terminal en Barrio Peral y enlaza, por medio de otro colector, con la depuradora de Cabezo Beaza. Todo funcionará con mayor fluidez gracias a las nuevas instalaciones.

Los planes de Hidrogea para modernizar la red de alcantarillado en esta zona no se limitan a la sustitución de una infraestructura de impulsión por otra. En las siguientes fases, se establecen más mejoras de ese circuito principal de colectores, en el que también hay partes antiguas.

Pero la propuesta para completar el circuito y darle continuidad en el Barrio de la Concepción y en el futuro ensanche urbano del Plan Rambla, es la conexión de la estación de bombeo al tanque de tormentas ubicado junto a la rambla de Benipila. Contar con su concurso permitirá perfeccionar las prestaciones de todo el circuito. Podrá ser utilizado como un depósito de reserva, conectado con la infraestructura de impulsión, para despejar del todo cualquier posibilidad de atascos y vertidos incontrolados a la rambla de Benipila. Todos estos trabajos multiplican hasta por tres la inversión inicial en la estación de bombeo. Por eso, el Ayuntamiento prefiere ser cauto e ir paso a paso.