Imposible aparcar gratis en el centro de Cartagena después de las diez

Los dos aparcamientos suelen llenarse con facilidad los días laborales «sobre todo por las mañanas, no hay forma de encontrar sitio», según José Enrique Martínez. Este estudiante que lleva seis años en Ingeniería Telemática vive en un piso cerca de la Universidad no mueve el coche cuando logra estacionar.

«Cuando vengo los fines de semana por la tarde sí hay algo más de espacio, pero ahora nada», explica. A lo que añade que «fuera de aquí también es difícil localizar un sitio donde dejar el coche».

Dionisio Martínez, que suele tener clases por la tarde pero ayer fue por la mañana a hacer un trámite, lo corrobora: «En mi horario, como hay menos gente dando clase, suele haber algo más de hueco para aparcar, aunque tengo que dar alguna vuelta para encontrar pero por la mañana es muy difícil».

A Carlos Navarro incluso lo multaron un día por aparcar en la rampa de acceso a Antiguones. «Como no había sitio en ningún lugar y tenía que entrar a una práctica a la que no podía faltar dejé el coche ahí una hora solo y cuando salí ya tenía el papel», lamenta.

«Pero claro si abajo tampoco hay sitio, ¿dónde dejamos el coche si tenemos que entrar rápido?», cuestiona una amiga que acompaña a Navarro. Los coches en doble fila no faltan cada mañana en el parking de Antiguones.

Los miembros de la Universidad que van al campus del Paseo de Alfonso XIII tampoco lo tienen fácil. En esa zona además no hay ningún solar adecuado para aparcar. Deben dejar los coches en las plazas de ORA que rodean las escuelas técnicas. En esta misma situación se encuentran las personas que acuden al centro de la ciudad a trabajar o a hacer cualquier gestión.

Estos estacionamientos se dividen en dos zonas, una azul y otra verde. La primera de ellas está destinada a una mayor rotación de vehículos, con un estacionamiento mínimo de 30 minutos y máximo de dos horas y media, pasado ese tiempo no hay que retirar el coche pero sí volver a pagar, mientras que la verde está destinada a un estacionamiento más prolongado. Es la que más utilizan las personas porque dispone de dos tarifas que permiten estacionar durante un período más prolongado de forma más económica: una tarifa de mañana o tarde y una tarifa para todo el día. Sin embargo, hay muchas menos plazas de este tipo que de las azules, que son más costosas. También es difícil encontrar hueco entre las diez de la mañana y la una de la tarde.

El Ayuntamiento tiene previsto crear dos aparcamientos disuasorios en el Ensanche de la ciudad con más de ochocientas plazas. Uno, en la plaza Severo Ochoa para 120 vehículos; y el segundo en el aparcamiento de Eroski, con 700 plazas. Este último tendrá conexión directa con el carril bici de la avenida Sebastián Feringán y las calles del Plan Rambla, y contará con plazas reservadas a personas con movilidad reducida. Ambos quedan lejos de la zona donde cada mañana hay mayor concentración de vehículos.

«Con la ampliación de la red de carriles bici y la creación de nuevos aparcamientos disuasorios proporcionaremos alternativas de movilidad eficaces y respetuosas con el medio ambiente», explican en el Ayuntamiento. También barajan ampliar la frecuencia de los autobuses para unir esos estacionamientos con el centro.

La única ampliación de zona ORA prevista es la de Los Dolores. Está supeditada a la implantación de un nuevo aparcamiento disuasorio en estudio. En el Ayuntamiento también monitorizan la situación del centro cada día, dicen. El objetivo es buscar alternativas para mejorar las conexiones del transporte público con los aparcamientos disuasorios.