El Gobierno descarta la reconstrucción del antiguo cuartel de la Guardia Civil de Cartagena
El Ejecutivo central señala, a preguntas del PP, que debe priorizar nuevas actuaciones de reparación de otras instalaciones
La reconstrucción del cuartel de la Guardia Civil ya no está de momento en los planes del Gobierno de España. Esa es la respuesta que ... ha recibido del Ejecutivo central el senador del PP Francisco Bernabé. El también exalcalde de La Unión y exdelegado del Gobierno anunció este verano que volvería a preguntar al gobierno de coalición de PSOE y Sumar por la situación del cuartel derribado por su mal estado estructural y que mantiene a los agentes y a sus familias reubicados provisionalmente en un antiguo colegio.
Publicidad
La pregunta que Bernabé trasladaba junto a los también senadores Antonio Luengo, José Ramón Díez de Revenga y Antonia López, era si existía un proyecto de reconstrucción del antiguo cuartel de la Guardia Civil en Cartagena, si estaba ya redactado y si el mismo iba a licitarse pronto. La respuesta es contundente: «En relación con las preguntas referidas, se informa de que actualmente no está prevista la construcción de un nuevo cuartel de la Guardia Civil en la localidad de Cartagena». Palabras que no dejan lugar a dudas de que la ciudad no contará otra vez con la presencia de la Benemérita en su lugar de siempre, junto al parque de los Juncos. Al menos así será de momento y hasta dentro de mucho tiempo. El proyecto que en un inicio era una prioridad, ahora pasa a un segundo plano porque, añaden desde el Gobierno central, «las necesidades de los más de 2.400 acuartelamientos de la Guardia Civil en toda España, debido a la ausencia de mantenimiento y reformas básicas entre los años 2011 y 2019, hacen que se haya tenido que acometer importantes inversiones en los mismos o construir nuevas infraestructuras, teniendo que priorizar las actuaciones de nuevas construcciones según las necesidades más urgentes». Así finaliza el escueto comunicado, que deja caer una evidente pulla al gobierno del PP de Mariano Rajoy.
Este pasado mayo se cumplía precisamente un año de la demolición de los edificios ubicados entre las calles Ángel Bruna, Alfonso X y Wsell de Guimbarda. Hasta el momento todo en los últimos meses había sido secretismo por parte del Ministerio del Interior, que en reiteradas ocasiones no contestó a las preguntas de este periódico sobre la situación del expediente.
La Dirección General de la Guardia Civil ordenó hace dos años el desalojo de todos los servicios ubicados en el acuartelamiento, así como el de sus cien viviendas debido a la situación de ruina detectada por sus servicios técnicos en diferentes inspecciones al recinto. El edificio, que incluso sobrevivió a un atentado con coche bomba perpetrado por ETA en 1990, cayó como un castillo de naipes dejando en su lugar un inmenso solar vacío.
Publicidad
En octubre de 2023, el Consejo de Ministros aprobó, a propuesta de Interior, la declaración de emergencia para la contratación de las obras de reconstrucción por importe de 31.956.070,04 euros y un plazo de 36 meses. Pero fechas más tarde, el Gobierno suspendió el contrato de emergencia y lo transformó en un procedimiento ordinario sujeto a una nueva tramitación y a obtener el presupuesto para la obra.
Una cubierta con goteras
Mientras tanto, las dependencias temporales del antiguo colegio Antonio Arévalo, que albergan la mayoría de servicios de la compañía de Cartagena, se han convertido casi en definitivas y la adecuación realizada para estar allí alrededor de tres años es insuficiente. De hecho, han ampliado espacios en una primera planta que inicialmente no iba a ser utilizada y hecho reparaciones de urgencia en la cubierta, pues cada vez que llueve hay goteras.
Publicidad
Durante todo el tiempo en que los efectivos del instituto armado llevan desplazados, no han sido pocas las quejas por el estado del antiguo centro educativo. Recientemente, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) llamaba la atención de que, más allá de las goteras, su actual edificio no cuenta con sistemas de medición del radón, un gas radioactivo natural que presentan las plantas bajas de los edificios y que es la segunda causa de cáncer de pulmón tras el tabaco.
Recientemente también, el Ministerio del Interior prorrogó hasta diciembre el contrato con el guardamuebles que custodia los enseres de las casi cien familias que vivían en la casa cuartel en el momento del desalojo. Hace unos meses le dieron de plazo hasta mayo. Después, cada familia tendría que afrontar los gastos de ese servicio. Pero la presión de AUGC hizo posible esa prórroga.
Publicidad
-
La maleza y la falta de limpieza generan problemas de plagas en torno al parque de los Juncos
Mientras el Gobierno ha permanecido sin definir sus intenciones con el viejo acuartelamiento de la Benemérita, al problema de que una ciudad de más de 200.000 habitantes carezca de un cuartel con las dimensiones y dotaciones apropiadas se han sumado las molestias vecinales en las que ha derivado el asunto. El solar donde se ubicaba el cuartel luce ahora totalmente tomado por la maleza, que sirve de refugio y escondrijo para todo tipo de insectos y roedores. Vecinos de Los Juncos ya han detectado la presencia de ratas en el parque, las cuales sospechan que podrían estar saliendo del solar del viejo cuartel, lo que supone un evidente problema de salubridad pública. Este periódico preguntó en varias ocasiones al Ayuntamiento si había requerido al propietario del solar para emprender su desbroce y limpieza, pero no obtuvo respuesta. Además, la asociación de vecinos ha denunciado en reiteradas ocasiones la organización de botellones en el parque, que dejan los parterres llenos de basura, así como molestias por ruidos y alguna asistencia médica urgente. Una actividad que ahora no cuenta con el efecto disuasorio de la presencia policial permanente.
Un pulmón verde
Por otra parte, hay vecinos y usuarios del parque que abogan por convertir la ausencia de cuartel en una oportunidad. Piden al Consistorio que se haga con la propiedad de los terrenos. Esto entienden que habilitaría la posibilidad de ampliar el propio parque de los Juncos, generando para el Ensanche un gran pulmón verde. La parcela del antiguo cuartel cuenta con nada menos que 7.791 metros cuadrados de solar que se podrían sumar a los 21.579 de zona verde ya existente. En este sentido, los vecinos ya han reclamado una remodelación del parque con intervenciones como la reparación de la fuente, juegos biosaludables y la supresión del pipicán.
Prueba LA VERDAD+: Un mes gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión