Arroyo anticipa que el traslado del CATE debe hacerse la próxima Semana Santa
La alcaldesa subraya que en siete días se adjudicará la obra para los accesos y la urbanización de la zona, que pagará la Autoridad Portuaria
La alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, avanzó este martes que espera que el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) tenga lista su ubicación definitiva «en Semana Santa del año que viene, en unos terrenos ubicados al noroeste del monte Galeras«, para sustituir a las instalaciones recién abiertas en El Espalmador.
La primera edil hizo estas declaraciones en calidad de miembro del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, institución que adjudicará la obra. Lo hizo al día siguiente de que el delegado del Gobierno, José Vélez, comunicara la apertura de la instalaciones temporales en El Espalmador y subrayara que estarán abiertas como máximo un año, para ser sustituidas después por el centro definitivo.
Arroyo explicó en una presentación ante la prensa que en una semana se concederá «el contrato para la ejecución de todo el vial del Espalmador. En la licitación se incluye el coste del traslado de la ubicación provisional del CATE, impuesta a los cartageneros en ese entorno y sin consenso». Recordó que el lugar elegido para el traslado es el emplazamiento de unos depósitos de la Armada que están en desuso en la ladera noroeste del Monte Galeras.
«Es un lugar que cumple las mejores condiciones para la prestación del servicio por parte de las fuerzas de seguridad del Estado y de las organizaciones no gubernamentales que atienden a los inmigrantes. Además no condiciona el proyecto que hemos preparado junto con la Autoridad Portuaria para el desarrollo de la zona hacia el Espalmador, promocionando el uso y disfrute de todos los cartageneros», apuntó la primera edil.
«Es un proyecto de futuro que debe servir para habilitar una zona peatonal y ciclable que quede conectada con el Espacio Algameca de forma que se pueda llegar de la rambla de Benipila al Faro de Navidad con las adecuadas medidas de seguridad», indicó Arroyo.
«Habríamos deseado que las cosas se hicieran bien desde el principio, en lugar de enterarnos por la prensa de la elección de la ubicación provisional del Cate. Pero en menos de un año nos garantizamos el traslado a la definitiva, aunque sea a costa de un gasto innecesario que nos podríamos haber ahorrado si el Ministerio del Interior y la Delegación del Gobierno hubieran trabajado de la mano del Ayuntamiento y de la Autoridad Portuaria», apuntó Arroyo.
Comentó que la inversión de medio mllón incluye los accesos y la urbanización de la zona. La nueva instalación se verá favorecida, dijo, porque la construcción del centro provisional es modular y se puede emplear en el definitivo. «Parte del dinero previsto es para todo aquello que tendrá que hacerse de nuevo», apuntó.