La Augc reclama el doble de efectivos para luchar contra los narcos y la inmigración ilegal
La Asociación Unificada de la Guardia Civil exige la incorporación de una cuarta embarcación al Servicio Marítimo en el puesto de Cartagena
El doble de efectivos y otra embarcación más para el Servicio Marítimo (Semar) de la Guardia Civil, que lucha contra el trafico de droga en la costa de la Región y la inmigración ilegal. Estas son las principales reclamaciones que la Asociación Unificada de la Guardia Civil (Augc) en la Región quiere volver a hacer públicas tras la muerte de dos agentes en aguas de Barbate cuando la zódiac en la que viajaban fue embestida por una narcolancha a la que perseguían.
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Desde el sindicato aclaran que la lucha contra los narcos en el mar no es tan habitual en el litoral de la Comunidad como la guerra encarnizada y enquistada que existe en el litoral andaluz. La costa de la Región, no obstante, es zona de paso de los narcos que parten del norte de Marruecos y navegan hacia Valencia y Cataluña a bordo de las planeadoras. La Comunidad, además, es también punto de destino de la droga.
Una de las actuaciones más destacadas del año pasado fue la detención, en el mes de marzo, del patrón de una embarcación por tráfico de drogas y la aprehensión de la lancha de fibra de seis metros de eslora, en la que transportaba 1.260 kilogramos de hachís.
«Hay una plantilla de 31 agentes; debería haber al menos 60 para cubrir todos los servicios»
No es la única lancha para transportar droga que se intervino en 2023. En febrero confiscaron una planeadora semirrígida de doce metros de eslora, propulsada por tres motores fueraborda con 300 caballos.
Los guardias civiles del Semar del puesto de Cartagena se encargan de controlar las 100 millas (unos 200 kilómetros) de costa —contando el Mar Menor— que tiene la Región y actualmente tiene una plantilla de 31 componentes. «Llevamos años denunciando que con esa plantilla no se pueden cubrir la totalidad de los días mensuales. Al menos debería tener una plantilla de 60 componentes para garantizar una embarcación de servicio todos los días. De este modo, cuando hay un alijo de droga o, lo más común, las llegadas de inmigrantes en pateras, a veces no hay servicio. En el caso de los inmigrantes, suelen llegar a las costas porque no son interceptados en el mar», señalan desde Augc.
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En cuanto a embarcaciones, el Semar cuenta con tres: una rápida, que alcanza 50 nudos de velocidad máxima; otra de velocidad sostenida, con 36 nudos, y una auxiliar de aluminio y dos motores, que suele usarse en el Mar Menor o servicios no peligrosos, ya que solo tiene capacidad para dos tripulantes. «No sería descabellado tener otra embarcación, para que cuando se averíen sean sustituidas rápidamente», afirman desde la agrupación de guardias civiles.
«Bajo mínimos»
Por su parte, la sección sindical de CC OO en Salvamento Marítimo (Sasemar) alerta de la situación que se está produciendo en los centros de coordinación, donde se están quedando turnos de guardias con menos efectivos de los que establece el convenio colectivo.
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En concreto, desde el sindicato afirman que en el centro de coordinación en Cartagena (Cartagena Port Control) se han quedado «bajo mínimos» con turnos de guardia con un solo controlador. «Este trabajador ha tenido que encargarse del control del tráfico en el puerto, la seguridad marítima, el salvamento de personas en la mar y la lucha contra la contaminación durante siete horas seguidas, en los turnos de mañana y de tarde, y durante 10 horas en el turno de noche».
El sindicato señala que si esa persona enfermara durante la guardia, «el centro de coordinación quedaría completamente desatendido, no habría nadie para recibir una llamada de socorro, gestionar y coordinar una emergencia o movilizar una unidad. Una situación que lejos de ser puntual se está convirtiendo en estructural», advierten desde CC OO.
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