Más de 40.000 profesionales afrontan la OPE del SMS sin conocer el resultado de la anterior

Más de 40.000 profesionales que el año pasado se presentaron a las pruebas de la oferta pública de empleo (OPE) ordinaria del Servicio Murciano de Salud (SMS) tendrán que volver a examinarse en los próximos meses de las nuevas oposiciones sanitarias sin conocer todavía el resultado del anterior proceso. El retraso en la baremación de los méritos está detrás de esta situación, que genera incertidumbre y quejas por parte de los afectados. Los sindicatos denunciaron ayer, en la Mesa Sectorial de Sanidad, este solapamiento, que achacan a la falta de personal administrativo en los servicios centrales de Habitamia, sede del SMS. También a la demora en la convocatoria de la OPE ordinaria, «que debería haberse celebrado un año y medio antes», lamentó Javier Lanza, secretario general de la Federación de Sanidad de Comisiones Obreras.

El director gerente del SMS, Asensio López, anunció la creación de un equipo de 16 administrativos que ayudará a los tribunales a realizar las baremaciones, pero admitió que es ya imposible que estas puntuaciones se publiquen antes de la celebración del examen de celador, previsto para el 10 de marzo, con 18.000 aspirantes. Los sindicatos dan por hecho que tampoco habrá listas, ni siquiera provisionales, para cuando lleguen las pruebas de Enfermería, el 12 de mayo, con casi 6.000 opositores.

De las 70 categorías de la OPE ordinaria, celebrada el año pasado, solo tres cuentan ya con listados definitivos de puntuación en la fase de concurso. Se trata de Cirugía Pediátrica, Dermatología y Endocrinología, tres especialidades médicas con muy pocas plazas (ocho en total). Hay, además, baremación provisional en Medicina Nuclear, Oncología Médica y Técnicos en Dietética y Nutrición.

En otras 23 categorías no hay todavía baremación de méritos pero, al menos, sí se ha publicado la puntuación de la fase de oposición. En las 42 restantes, no ha empezado aún la valoración, según los datos que el SMS facilitó ayer a las organizaciones sindicales.

«El solapamiento de las dos OPE está alterando la conciliación de la vida familiar y laboral de los opositores y les obliga a invertir tiempo y dinero», denunció Antonio Martínez, secretario de Organización del Sindicato de Profesionales de la Sanidad (SPS). «Hemos pedido por activa y por pasiva un refuerzo de los recursos humanos», advirtió. La situación no solo generará incertidumbre y molestias a los profesionales, sino también a los pacientes, señala el SPS. «Hay muchos facultativos pidiendo excedencias», aseguró Martínez. 'La Verdad' informó la semana pasada de que la falta de anestesistas en el Santa Lucía había dejado a medio gas los quirófanos del hospital, aunque la Administración no vincula este hecho con las oposiciones. El Colegio de Médicos recordó que se trata de permisos a los que los facultativos tienen derecho y advirtió de que es responsabilidad del SMS organizar los servicios.

María Ángeles del Amo, secretaria general del sector de Sanidad de FeSP-UGT, denunció que «la mala gestión del SMS» aboca a muchos profesionales a tener que pasar por unas nuevas oposiciones pese a que, de acuerdo a sus méritos y a la nota de la OPE anterior, obtendrán probablemente plaza en ese proceso previo. Si finalmente es así, el segundo examen no servirá para nada, porque no hay opción a elegir entre la plaza alcanzada en las primeras oposiciones y la conseguida en las segundas. El SMS se ha comprometido a que, en esos casos, devolverá las tasas de la nueva OPE a los opositores.

El pago de dos tasas es precisamente una de las consecuencias del solapamiento, que provoca sobre todo incertidumbre y obliga a compaginar el trabajo con el estudio de los temarios. Para Javier Lanza, secretario general de la Federación de CC OO, todo esto se podría haber evitado si la Administración no se hubiese retrasado en la convocatoria de la OPE ordinaria correspondiente a los años 2014, 2015 y 2016, cuyos exámenes no se empezaron a celebrar hasta 2018. Una vez iniciado el proceso, los plazos han ido demorándose entre quejas recurrentes de los sindicatos. Ahora, las baremaciones se han atascado. «Son muy complejas, se ha llegado a tardar tres o cuatro horas en la puntuación de un solo expediente», advirtió Luis Esparza, secretario de acción sindical de SATSE.

El director gerente del SMS, Asensio López, admite las dificultades. «Hoy [por ayer], el tribunal de Matronas ha necesitado una mañana para baremar dos expedientes», explicó. «Son evaluaciones complejas» que obedecen a los criterios establecidos para tratar de valorar de la forma más exhaustiva posible a cada candidato.

Los sindicatos creen, sin embargo, que faltan medios, y denuncian la falta de incentivos a los administrativos. «Esto se podría paliar con horas extraordinarias por la tarde, pero el problema reside en que a los trabajadores no se les paga hasta dentro de un año», lamentan desde CSIF. La prolongación de jornada no está permitida para estos profesionales, y debe ser autorizada de forma excepcional por el Consejo de Gobierno, explica este organización. Como resultado, se paga a año vencido.

Por su parte, el Sindicato Médico pide «más agilidad» y propone que se prioricen los baremos de aquellas categorías con exámenes de la nueva OPE más próximos en el calendario.

La OPE extraordinaria en curso, convocada en toda España para reducir la alta tasa de temporalidad en el sistema sanitario, ha puesto en juego 5.326 plazas en el Servicio Murciano de Salud, que se suman a las 1.250 de la oferta pública de empleo ordinaria de 2014, 2015 y 2016, cuyas pruebas se realizaron el año pasado. En esta nueva OPE, los exámenes comenzaron el pasado tres de febrero. El primero de todos se correspondió con la categoría de Matronas. Unos 300 candidatos optaron a alguna de las 34 plazas en juego. Lo hicieron sin conocer su puntuación en la fase de concurso de las oposiciones anteriores. Lo mismo les ocurrió, el pasado día 17, al millar de fisioterapeutas que se examinaron en busca de uno de los 43 puestos en liza en esta categoría. El próximo 10 de marzo llegará el turno de 18.000 celadores, que tampoco podrán saber previamente si sus méritos les acercan o no a una plaza en la OPE ordinaria.

El calendario, consensuado con el Ministerio para que las pruebas coincidan en la mayoría de comunidades, se ha tenido que modificar tras la convocatoria de las elecciones generales para el 28 de abril. Ese día estaban convocados unos 13.000 aspirantes a auxiliar de Enfermería, pero finalmente la prueba se celebrará el 7 de julio. La nueva fecha se ratificó ayer en la Mesa Sectorial de Sanidad no sin polémica, porque algunos sindicatos consideran que se trata de un retraso excesivo que genera muchos perjuicios a los opositores. CC OO era partidario de adelantar la fecha al 27 de abril, sábado, algo que el SMS descarta por tratarse del día del Entierro de la Sardina, en Murcia. «Se podría haber planificado para evitar problemas, convocando a algunos grupos en Cartagena», señala Javier Lanza. Satse, por su parte, propuso el 1 de mayo.