La editorial más verde

La pandemia del coronavirus ha sacudido el planeta con una depresión económica cuya resaca es aún imposible calibrar. Esta crisis sanitaria, que afecta a todos los sectores productivos, también ha puesto a reflexionar a profesionales que consideran obligatorio reformular sus métodos de trabajo. Nada será igual en la era post-Covid. Uno de ellos es el editor Rubén Hernández (Madrid, 1978), casi doce años al frente de Errata Naturae, el sello independiente que puso de moda en España la 'nature writing' –escritura de naturaleza–.

Muy enfocada en la publicación de relatos y ensayos sobre la relación entre las personas y la naturaleza, la editorial ha dado un paso más allá con el compromiso público de funcionar de la manera más respetuosa posible con el medio ambiente.

Así que retomará la publicación de libros el 1 de octubre, después de un parón desde el 16 de marzo «por razones de carácter existencial, ecológico y económico», con novedades que afectan a toda su cadena productiva: semana laboral de cuatro días para sus seis empleados manteniendo el mismo sueldo, bonificación del 5% en el salario bruto si se desplazan a pie o en bici al trabajo –que todos han aceptado encantados–, flexibilidad de horarios y emplazamiento, utilización del papel más ecológico, reducción de emisiones en sus oficinas y en el transporte –incluso en la mensajería–, apuesta por entidades de banca ética y por energía verde renovable y certificada por parte de una cooperativa a la que se han asociado, renuncia a participar en la mayor parte de las ferias para minimizar los desplazamientos en avión...

Errata Naturae también prescindirá a partir de ahora del plástico y sus libros serán 100% reciclables, algo que no es tan sencillo: «Esa lámina de plástico transparente es uno de los principales perturbadores del reciclaje de libros: lo hace un poco más difícil, un poco más caro y por lo general da lugar a fibras recicladas de peor calidad», explica la editorial en un texto en el que justifica los motivos de su refundación.

Otra novedad: cada nueva publicación de su colección Libros Salvajes estará vinculada con una organización local dedicada a la conservación de la fauna silvestre, que recibirá un 10% de las ganancias netas del libro.

'La flor' (Mary Karr), 'El leopardo de las nieves' (Vincent Munier), 'Medicina sagrada' (Cody Johnson), 'El murciélago y el capital' (Andreas Malm) y 'Un tiempo más salvaje' (William E. Glassley) abren la nueva etapa de Errata Naturae bajo una premisa que Rubén Hernández –que dirige la editorial desde un aislado valle cántabro– resume en esta frase: «Aprender a vivir como deseamos que sean nuestras vidas, deshilando hebra a hebra, y de forma colectiva, la trama que nos une a las estructuras económicas y sociales que nos vienen impuestas».