La ensalada del Mar Menor

Las redes sociales no son las Tablas de la Ley, pero sí un buen termómetro social. Twitter, Instagram, Facebook y Tik Tok (la nueva sensación) son un mundo paralelo y no siempre fiable, aunque se manifiestan infalibles para conocer los estados de opinión ante determinados asuntos, como la crisis ecológica del Mar Menor, que saltó las fronteras de la Región de Murcia gracias a fotos y vídeos que se hicieron virales en los teléfonos móviles. La penúltima escaramuza se libra en torno a la campaña publicitaria de la Fundación Ingenio, creada recientemente por 45 empresas para defender los intereses de 10.000 productores agrarios del Campo de Cartagena.

Ojo, por cierto, al tuit de Diego Conesa, secretario general del PSOE, en respuesta a otro de la Fundación Ingenio en el que defiende su campaña: «Los auténticos responsables de la destrucción de nuestra agricultura y Mar Menor son quienes incumplen la ley y se oponen a la necesaria reconversión sostenible del campo. La mejor defensa para nuestra agricultura es salvar el Mar Menor». Las cartas están sobre la mesa.

Para despejar dudas, la página web de la Fundación Ingenio recoge el argumentario del 'lobby' agrícola del Campo de Cartagena, que trata de frenar o al menos suavizar in extremis la Ley de Protección y Conservación del Mar Menor, que será aprobada el miércoles 22 de julio (es decir, la semana que viene) en la Asamblea Regional con un amplio respaldo parlamentario: PP, Ciudadanos y PSOE han pactado un gran número de enmiendas al decreto inicial, que rige desde diciembre pasado, entre ellas la ampliación de la banda de protección sin fertilizantes de 500 a 1.500 metros desde la orilla de la laguna.

Es posible que la campaña conmueva a mucha gente, que el mensaje cale y alguien se convenza de que, efectivamente, la aprobación de esta ley supondrá el fin de la agricultura intensiva en la cuenca del Mar Menor, y que por tanto se van a perder miles de empleos y miles de millones de euros. Pero, de momento, los 'zascas' en las redes están siendo épicos.