Cervecería Almudí, tapeo de barrio

Las tapas disponibles van desde las típicas marineras, calamar, pulpo al horno, o tigres de marisco -riquísimos, por cierto-, pasando por una sección de montaditos de ternera, pechuga con salsa tártara o ibéricos con foie y una parte final de mariscos y pescados que compran en Verónicas y donde los salmonetes, los chirretes o la gamba blanca forman parte del quinteto inicial.

Pero es que además, el local dispone de tapas y platos que se salen del sota, caballo y rey de siempre. Como, por ejemplo, el calamar relleno, los champiñones, las zamburiñas con kimuchi, el crujiente de gamba, las huevas de merluza en vinagreta, la lengua en sala, el gazpacho manchego, las manitas estofadas o, incluso, las lentejas con chorizo, el morrillo de atún, el entrecot y el chuletón. Toda una muestra de los productos de primera que le proporciona el hecho de estar tan cerca del mercado.

Muy buena mano en la cocina, un servicio de camareros cercano, de barra, con los que entablas relación con rapidez, y unos precios más que razonables. Imprescindibles los champiñones rellenos con queso, donde la salsa que desprenden es la verdadera protagonista del plato; la lengua en salsa al estilo tradicional, servida en cazuela; o los chirretes a la andaluza, que siempre traen alguna gamba blanca de regalo y que tienen un sabor a mar delicado y profundo. Además, hacen asiáticos y carajillos quemados.

Cervecería Almudí es un bar de barrio de los de siempre, pero en el centro de la capital, con un abanico de platos de gran nivel difícil de probar en una sola visita. Por eso es uno de esos locales para volver y volver. Para ver qué género han traído de Verónicas o qué guiso del día está disponible.