El PP controlará la Asamblea al ocupar tres de los cinco puestos de la Mesa

Ceder a Vox un solo sillón en la Mesa sería concederle la capacidad para bloquear o favorecer iniciativas parlamentarias, al ser su voto el que rompería el empate entre el PP y el PSOE, que contarían cada uno con dos puestos.

En la pasada legislatura, el PP estuvo en minoría en la Mesa durante casi toda la legislatura, a pesar de ser el partido del Gobierno. Las negociaciones con Ciudadanos y también con Vox para lograr la investidura como presidente de Fernando López Miras forzaron a los populares a ceder la presidencia de la Asamblea a la formación naranja, que ocupó Alberto Castillo, y la secretaría primera fue para el diputado de Vox Francisco José Carrera. Otros dos puestos los ocupó el PSOE y el quinto se lo quedó el PP.

En esta ocasión, la situación de partida del PP es mucho más sólida, ya que cuentan con 21 escaños, cinco más que en 2019, y prevé sacar partido de ella.

La elección de la Mesa de la Asamblea tendrá lugar en la sesión constitutiva de la Cámara, fijada para el 14 de junio a las once de la mañana. Una vez tomen posesión de sus escaños los diputados elegidos el 28-M, se procederá a elegir en primer lugar el presidente del Parlamento autónomo. Según el procedimiento recogido en el Reglamento de la Asamblea, cada parlamentario deberá escribir un nombre en una papeleta y será elegido presidente el que obtenga mayoría absoluta. Si nadie lo consigue, se repetirá la votación y en este segundo intento entonces será presidente el que tenga más votos con su nombre.

Como ningún grupo posee mayoría absoluta, y la única posibilidad lógica de alianza podría alcanzarla es la suma de PP y Vox, lo que no entra en los planes de los populares, al menos de momento, lo normal es que cada grupo presente a su propio candidato para presidir la Cámara, lo que supondrá que salga elegido el propuesto por los populares en la segunda votación.

En círculos del partido que preside López Miras se especulaba ayer con la identidad del sustituto de Alberto Castillo al frente del poder legislativo regional, y tres eran los nombres más repetidos: Miguel Ángel Miralles, que en la pasada legislatura fue el vicepresidente primero de la Mesa; Visitación Martínez, exalcaldesa de San Pedro del Pinatar, y Joaquín Segado, portavoz parlamentario del PP.

La composición de la Mesa se completa con dos vicepresidentes y dos secretarios, En los dos casos se eligen de forma simultánea y con el mismo sistema por el que se eligió al presidente, por lo que lo normal es que en segunda votación el PP se lleve el vicepresidente y el secretario primeros y el PSOE, al ser el segundo grupo con más diputados, se lleve el vicepresidente y el secretarios segundos.

Tras la constitución de la Asamblea y la elección de la Mesa, será su presidente el que asuma el protagonismo, al ser el encargado de iniciar las consultas con los grupos parlamentarios para proponer un candidato a la presidencia de la Comunidad y fijar la fecha del debate de investidura.