Aumentan las indemnizaciones por lesiones en accidente laboral después de 10 años: estas son las nuevas cuantías
La Seguridad Social actualiza las cantidades según el IPC
Después de diez años, la Seguridad Social ha optado por actualizar las indemnizaciones por accidentes laborales en los que se sufran lesiones, mutilaciones y deformidades de carácter definitivo pero que no produzcan invalidez. Se trata de las lesiones causadas por accidentes de trabajo o enfermedades profesionales que, sin llegar a constituir una incapacidad permanente, supongan una disminución o alteración de la integridad física del trabajador.
Dicha actualización ha quedado plasmada en el anuncio publicado el 6 de mayo en el Boletín Oficial del Estado, donde se estipula que los nuevos importes se establecen según el Índice de Precios de Consumo (IPC). Esto supone la primera adaptación desde que se actualizaron por última vez en 2013, que ajustaba las cuantías al IPC de diciembre de 2011, algo muy lejano a la situación actual. Desde ese momento, el IPC ha incrementado considerablemente, hasta en un 19,8% con fecha de diciembre de 2022.
Así, con la orden publicada este mes de mayo, las cuantías para cada tipo de indemnización aumentan también ese porcentaje. Las cifras finales para cada caso se pueden consultar en la tabla que la Seguridad Social ha establecido para su consulta. Las lesiones contempladas serán indemnizadas por una sola vez con las cantidades determinadas.
Será la entidad o mutua en colaboración con la Seguridad Social que se encuentra al cargo del trabajador quien se encargue de la indemnización y prestaciones de incapacidad permanente. En estos casos, el trabajador que haya sufrido el accidente laboral y reciba la indemnización no se verá impedido para continuar al servicio de la empresa.
Los casos contemplados están categorizados según las partes del cuerpo accidentadas: cabeza y cara, aparato genital, glándulas y vísceras, miembros superiores, miembros inferiores y cicatrices no incluidas en los epígrafes anteriores. Para cada tipo de lesión, la actualización ha aumentado sus indemnizaciones en el porcentaje indicado. Así, por ejemplo, perder un riñón pasa de una indemnización de 4.260 euros a 5.103 y perder el dedo corazón completo de la mano con la que más se trabaja, de 2.870 a 3.438 euros.