Las multas que pueden llegarte al vivir en un municipio en el que no estás empadronado
Los ciudadanos se suelen mudar a otra ciudad sin actualizar su residencia actual
María Ramírez
Lunes, 19 de agosto 2024, 12:39
Residir en un municipio sin estar empadronado en él es más común de lo que parece. Numerosos ciudadanos se trasladan a una nueva ciudad por motivos laborales, académicos o personales, pero optan por no realizar el trámite para registrar su residencia en este lugar. A menudo, esta decisión se debe a la falta de tiempo, desconocimiento de las implicaciones legales o simplemente por la intención de regresar a la vivienda anterior próximamente.
La realidad es que no llevar a cabo este procedimiento administrativo puede acarrear ciertos problemas: el acceso a servicios públicos locales, como la atención médica y la escolarización de los hijos o la obtención de ayudas de este enclave, entre otros aspectos. Además, puede derivar en multas de hasta 150 euros.
El motivo de esta sanción se debe a que se incumple lo expuesto en el Real Decreto 1960/1986, donde se establece que todas las personas tienen la obligación de registrarse en el municipio donde se encuentra su residencia habitual. En concreto, el artículo 63 de dicho Real Decreto menciona que todo ciudadano, español o extranjero que resida en territorio español debe estar empadronado en el municipio de su residencia habitual.
El importe de la multa cambia en función del número de habitantes censados en el municipio en cuestión. Como indica el artículo 59 del Real Decreto 781/1986 del 18 de abril, las cuantías fijadas son las siguientes:
- Municipios entre 5.001 y 20.000 habitantes: 3 euros de multa.
- Municipios entre 20.001 y 50.000 habitantes: 60 euros de sanción.
- Municipios de 50.001 a 500.000 habitantes: 90 euros de multa.
- Municipios con más de 500.000 habitantes: 150 euros de sanción.
Dónde empadronarse si se reside en dos sitios
Se puede dar la circunstancia de que un ciudadano resida en diversos lugares. En estos casos, la ley dicta que tendrá que seleccionar aquel municipio en el que viva más tiempo, es decir, el lugar que se considere como residencia habitual y donde se mantenga una mayor permanencia. Cabe recordar que, aunque se resida temporalmente en distintas ubicaciones, solo se puede estar empadronado en un municipio a la vez.