Repsol avanza en su estrategia centrada en el hidrógeno renovable

Cada vez es más común escuchar hablar de hidrógeno renovable. Leemos que puede ser la energía con la que nos movamos y que va a permitir descarbonizar algunos sectores como el industrial, pero ¿sabemos qué es y para qué se utiliza el hidrógeno?

Empecemos por el principio. El hidrógeno es el elemento más común de la naturaleza. El sol está hecho fundamentalmente de hidrógeno. Aquí en la tierra lo tenemos en forma de agua (H2O) y lo podemos utilizar como combustible, de manera que no es una energía en sí misma, sino un vector energético que se utiliza en el ámbito industrial para obtener un producto o una energía. La siguiente cuestión que nos podríamos plantear es ¿para qué se utiliza hoy en día?

El 90% se usa en el sector industrial como materia prima en el refino –para la fabricación de los combustibles que usamos en nuestros vehículos y materiales esenciales para la movilidad, la construcción, el sector sanitario y el agrícola–, y en otros ámbitos como la producción de amoníaco, en la industria del acero o en la química.

Por ese motivo, la Unión Europea visualiza el despliegue del hidrógeno renovable en primer lugar en la industria y en aquellos sectores que no tienen en la electrificación una alternativa a corto y medio plazo para alcanzar la descarbonización. En línea con las instituciones europeas, y en pleno proceso de transformación industrial, compañías como Repsol –que se ha marcado el objetivo de ser cero emisiones netas en 2050–, ha puesto uno de los focos de su estrategia, en el hidrógeno renovable con el desarrollo de diferentes proyectos.

Uno de los más ambiciosos, y que tiene a Cartagena como protagonista, es la construcción de un electrolizador, o lo que es lo mismo, una planta para la fabricación de hidrogeno renovable que servirá para que sus procesos sean más sostenibles.

La siguiente pregunta que nos podríamos hacer es: ¿cómo se va a fabricar ese hidrógeno renovable? Existen diferentes maneras de conseguirlo, pero la tecnología más avanzada en la actualidad es mediante la electrólisis del agua. Consiste en la separación de la molécula de agua en hidrógeno y oxígeno mediante la aplicación de energía eléctrica renovable.

La planta del Valle de Escombreras, que se levantará bajo el paraguas del consorcio liderado por Repsol, y del que forman parte Engie y Enagás Renovable, tendrá una capacidad de 100 MW en su primera fase. La nueva instalación supondrá una inversión de 215 millones de euros y la generación de unos 1.100 puestos de trabajo en la fase de construcción, puesta en marcha y producción, prevista para 2025.

Esta nueva planta, que se ubicará en el interior del complejo industrial de Repsol en Cartagena, forma parte del plan de transformación energética que está desarrollando Repsol en sus centros productivos para avanzar en su objetivo de ser una compañía cero emisiones netas en 2050. El electrolizador del Valle de Escombreras, evitará la emisión a la atmósfera de más de 167.000 toneladas anuales de CO2, y contribuirá a la disminución del consumo de gas natural que utiliza la industria actualmente y, por tanto, a la consecución del objetivo marcado por la Comisión Europea de disminuir la dependencia energética del exterior. Se trata de un proyecto que cuenta con el respaldo de la Comisión Europea, que ha calificado el electrolizador de Cartagena como 'Estratégico y de Interés Común Europeo'.

La hoja de ruta de Repsol respecto al hidrógeno renovable es liderar el mercado en la Península Ibérica y jugar un papel protagonista en Europa. Así, la compañía se ha marcado el objetivo de alcanzar los 552 MW de capacidad instalada en 2025 y 1,9 GW en 2030, e invertirá hasta esa fecha 2.549 millones de euros en proyectos que desplegará en toda la cadena de valor.

Para ello, Repsol utilizará tecnologías disponibles para alcanzar sus objetivos como la electrólisis o la producción a partir de biogás

En cuanto a la electrólisis, la tecnología de producción que se encuentra disponible ahora, Repsol ha anunciado la construcción de varias plantas. Además de la de Cartagena, la compañía ha proyectado otras en Bilbao, Tarragona, La Coruña y Puertollano.

Siguiendo con las preguntas que nos hemos planteado, además de para la industria, ¿se moverán en el futuro los coches con hidrógeno? La realidad es que aún tendrán que pasar algunos años para que la tecnología se desarrolle, pero la realidad es que algunas marcas ya han puesto en el mercado vehículos que se mueven con pila de combustible y que están preparados para utilizar hidrógeno.

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