Crispación arbitral, un Palacio que vibra y una pedida de matrimonio
«Hemos reactivado el espíritu UCAM Murcia», analizaba un satisfecho Sito con un equipo al que ha «costado ver en otros partidos»
Con cierta dualidad de sensaciones se marchó este domingo Sito Alonso a casa. Por un lado, una derrota cuenta igual en términos de clasificación independientemente de cuál sea su desarrollo. Pero, por otro, esta es la manera de la que a un entrenador menos le importa perder, viendo a un equipo que le ha «costado ver en otros partidos», reconocía, y que le hace sentir optimista para lo que viene. Pues, según decía, «hemos reactivado el espíritu UCAM Murcia en el Palacio», un pabellón que superó los 7.000 espectadores por tercera vez esta temporada y en el que a su equipo le había costado dar su mejor versión, pero que la dio «cuando todo parecía estar perdido», hasta el punto de poder ser «un equipo extremadamente poderoso».
Pero, eso sí, no todo lo que pasó en el partido fue de su agrado. Y es que «es muy difícil ganar al Barça cuando tiran trece tiros libres más, sobre todo en circunstancias finales en que era muy importante ir al tiro libre». Algo que, aseguraba, «necesito analizar para ver si eran faltas y si estaban equiparadas con lo que podía haber en el otro lado». Se refirió, más específicamente, a las situaciones de canasta y falta. «Hoy era el día del 2+1, pero no para nosotros».
Ambiente que engancha
Las quejas arbitrales de Sito Alonso fueron también las del Palacio, que, partido al margen, se lo pasó en grande. Vibró con un equipo al que le gustó ver y disfrutó con todo aquello paralelo a lo que ocurrió en el partido.
Por lo pronto, con un espectáculo de magia que al descanso sorteó entre sus participantes una PlayStation 5, así como con actividades más asentadas como los concursos de tiro o la cámara del beso en el viodemarcador.
Además, el partido de ayer dejó un futuro matrimonio, pues, cuando los equipos volvían a pista después del descanso, se produjo una pedida de mano. La agraciada, que dijo sí entre una visible emoción, es una murciana divulgadora matemática 'influencer' de redes sociales, @laurimathteacher, con más de un millón y medio de seguidores en TikTok.