Mo Katir se retira en Oslo en una milla que domina el noruego Jakob Ingebrigtsen

Noche para olvidar. El muleño Mo Katir se plantó este jueves en Oslo con el sueño de batir el récord más antiguo del atletismo español, el que logró José Luis González el 27 de julio de 1985, en Oslo, en los Bislett Games. Fue en la milla y el toledano hizo 3:47.79. Para ganarle, aquel día Steve Cram tuvo que hacer el récord del mundo (3:46.32). González batía en casi dos segundos su propia plusmarca española (3:49.67), también lograda, en 1981, en Oslo. En el mismo sitio, 37 años después, un Katir que el año pasado pulverizó tres récords de España (1.500, 3.000 y 5.000) en solo 33 días, se citaba con la historia en unos esperadísimos 1.609 metros de ensueño.

Pero el sueño de Katir rápidamente se convirtió en pesadilla. Empezó mal y se vio pronto en la cola del grupo. Llegados a los 300 metros empezó a remontar posiciones y se colocó junto al granadino Nacho Fontes en mitad del grupo. Fue un espejismo. Cabeceando y resoplando, a los 600 metros se paró. Abandonó. «Malas sensaciones», alegó después Katir, alejando el fantasma de una lesión que le hubiera dejado fuera del Mundial, que arranca dentro de un mes en Eugene (Oregón). No está bien Katir, lejos del atleta que asombró a todos hace un año.

La milla se la llevó Jakob Ingebrigtsen, el vikingo africano. El noruego se llevó el triunfo sin paliativos con 3:46.46. El público de Oslo enloqueció con Ingebrigtsen. Récord de Noruega y mejor marca mundial del año. Tras él, casi tan impresionante, el australiano Oliver Hoare, con 3:47.48. Nacho Fontes fue sexto con 3:54.72.

En los 110 vallas, el navarro Asier Martínez (13.30) estuvo impresionante y solo cedió ante el imbatible Devon Allen (13.22). Y Adel Mechaal hizo marca personal (13:06.02) y acabó séptimo en un 5.000 muy rápido. Se impuso el etíope Telahua Bekele con 13:03.51.

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