«Gracias a la familia Baeza por vuestro gran apoyo»

Se jugó en dos tiros en los reputados 9 hoyos pachequeros, y con lista de espera. Se disputó en la que ha sido la pionera instalación municipal murciana en mostrar el deporte de los palos a innumerables niños y adultos de la Región, a lo largo de tres largas décadas. Seis años después de su fallecimiento, el club que tanto amó, organizó una competición con su nombre que se unió al trabajo de la Asociación Miriam Meseguer. Asociación que recibió la recaudación íntegra de la competición, y cuya representante Inma Sánchez «agradeció tanto al club como a la familia Baeza –presente en el acto de entrega de premios– su gran apoyo».

La Asociación Miriam Meseguer nace con motivo «de la partida de Miriam, con tan solo 11 añitos –relató a los participantes de la prueba Sánchez–. Al año de fallecer su familia desencajada todavía por el dolor, intenta de alguna manera evocar a su pequeña a través de la asociación, creando un espacio donde se puedan compartir eventos de todo tipo y hacerlo extensivo a toda la comunidad». El primer proyecto en el que se trabajó fue la creación de un paseo. El paseo del recuerdo, donde familias con circunstancias muy similares –el haber perdido a un ser querido demasiado pronto–, contaran con un árbol plantado en memoria de ese ser querido al que tanto añoran.

Rafael Baeza tiene también en el paseo su árbol. Un espacio ubicado en unos terrenos cercanos a la Ermita de la Virgen del Pasico y cedidos por el Ayuntamiento de Torre Pacheco. Y aunque como indica Sánchez, «es un placer pasearlo», todavía se sigue mejorando y se está valorando una ampliación. La recaudación de la competición de golf con el nombre de Rafael Baeza, se sumará a ese esfuerzo por conseguir fondos para seguir trabajando en el paseo; porque «en el Club de Golf de Torre Pacheco estamos siempre a vuestra disposición para lo que necesitéis de nosotros. Ha sido un placer», se aseguró desde la organización de la prueba al hacer entrega del cheque, de casi 600 euros.

Entre palmeras y en las cercanías del 'green' del hoyo 8 del campo pachequero, también descansa la memoria de Rafael Baeza. Lo hace sobre una gran piedra y en forma de placa. Y fue precisamente allí, donde sus cinco hijos posaron para LA VERDAD, con una serena sonrisa en el rostro. La que le hubiera gustado ver a su padre. En la entrega, Rosario, su viuda, recibió un ramo de flores y el aplauso de los participantes tras escuchar unas emotivas palabras referidas a su marido en la reconocible voz de Juan Carlos Aguado, socio del club.

La jornada se cerró con la habitual entrega de premios en la que destacó el campeón 'scratch' de la prueba, el profesional Alejandro García Forrest, retirado desde hace algún tiempo del golf y de su enseñanza, pero uno de esos hijos del club que no dudó en participar en un torneo con el apellido Baeza y en favor de una causa tan loable.