Personas altamente sensibles (PAS): una reflexión
Hay demasiado gurú que, amparado en un título académico y aprovechando la ingenuidad de las personas, se lucra promoviendo esta polémica etiqueta
Te reconoces como una Persona altamente sensible (PAS)? ¿Crees que en tu entorno hay quien pertenece a esta nueva categoría? ¿Escuchas cada vez más hablar ... de esto y no sabes bien si abrazar dicha etiqueta o mantener una actitud escéptica? En un mundo donde se encubra el victimismo y la meritocracia de la mala suerte, no resulta extraño que aparezcan constructos pseudocientíficos para justificar o excusar determinados comportamientos. Pero, ¿constituye el PAS una nueva realidad o estamos ante una nueva patraña que favorece la desinformación y las pseudoterapias?
El término PAS (HSP o Highly Sensitive Person en inglés) surgió en 1996. Su principal precursora fue la psicóloga Elaine Aron, quien perfiló este 'rasgo' inspirándose en Carl Jung. Cuando Aron habla de 'alta sensibilidad' no se refiere a algo que tienes, como pudiera ser un trastorno o a una enfermedad, sino a algo que eres, a una forma de ser. Las ideas de Aron se volvieron internacionalmente populares tras la publicación de 'Hipersensibles, conocerse mejor para aceptarse a uno mismo' y 'Mi hijo es muy sensible'. Pero seamos francos y evitemos caer en la trampa del éxito editorial: ni la ética profesional ni la evidencia científica se miden en ventas de libros.
La definición de 'persona altamente sensible' es tan amplia que gran parte de la población puede encajar en ella. Si recurrimos al test de la Asociación de Personas con Alta Sensibilidad de España, encontraremos que sus preguntas son bastante genéricas: '¿Te molestan los ruidos fuertes?', '¿Te molesta mucho tener que hacer gran cantidad de cosas en poco tiempo?' o '¿Te afectan los estados de ánimo de otras personas?'. La etiqueta PAS es muy susceptible al efecto Forer, el cual ocurre cuando las personas acuden a una fuente que consideran confiable y aceptan como válidas consideraciones sobre sí mismas, que no son más que generalizaciones que pueden aplicarse a un gran número de personas. Este efecto está relacionado con el sesgo cognitivo de confirmación. Si alguna vez te has preguntado por qué algunos horóscopos te representan y parecen tan acertados a tu momento actual, ahí tienes también la respuesta.
Con respecto al test para 'detectar a PAS', hay que alertar de que no se trata de una prueba que esté científicamente validada. Por tanto, no es posible cuantificar de forma rigurosa su utilidad o establecer una correlación fiable entre lo que se quiere medir (la alta sensibilidad en las personas) con determinados criterios (por ejemplo, sentir molestia ante los ruidos fuertes). Si una persona tiene poca o nula cultura científica, o desconoce los tecnicismos teóricos y prácticos de la psicometría, es muy vulnerable a la aparente confiabilidad de esta prueba. De la misma forma, ese desconocimiento a menudo es aprovechado por algunos profesionales de la psicología para usar tal cuestionario de forma incompetentemente y además, como si fuera un criterio diagnóstico.
Tampoco encontramos el término PAS en la investigación científica. Ahora bien, lo que sí aparece es una característica de la personalidad conocida como sensibilidad de procesamiento sensorial (SPS). Este rasgo de personalidad marcaría características individuales en la percepción, el procesamiento y la interpretación de estímulos internos y externos. Dichas diferencias estarían relacionadas con las experiencias biográficas, el contexto y un sistema nervioso central más sensible (Aron y Aron, 1997; Lionetti et al., 2018; Greven et al., 2019). De acuerdo con algunos estudios, este rasgo se ha relacionado con una mayor reactividad emocional y empatía, una mayor conciencia de las sutilezas ambientales y la facilidad de sobreestimulación.
Actitud escéptica
La alta sensibilidad es un constructo que no está exento de detractores, si bien existen autores que siguiendo el método científico se esfuerzan por abordar esta cuestión en términos rigurosos. Aunque la etiqueta PAS tiene un aparente encaje en el constructo de la sensibilidad del procesamiento sensorial conviene ser prudentes. La mera extrapolación no es un criterio suficiente para otorgarle a la categoría PAS un cariz científico.
En definitiva, es importante mantener una actitud escéptica al respecto y estar alerta ante el actual negocio pseudocientífico que rodea a los supuestos PAS. Hay demasiado gurú que, amparado en un título académico y aprovechando la ingenuidad de las personas, se lucra promoviendo esta polémica etiqueta. Por si fuera poco, orientan a las personas ya no solo desde el engaño sino encauzando su vida en el victimismo y sin procurar el desarrollo de habilidades sociales imprescindibles para la vida en comunidad.
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