La cantante cartagenera Marta Casanova está detrás del proyecto musical Mavica.
Mavica

Marta Casanova: «La música se ha convertido para mí casi en una terapia; me libera»

Al frente de Mavica, la artista cartagenera presenta este sábado sus nuevas canciones en el Nuevo Teatro Circo por su 50 aniversario

Jueves, 24 de junio 2021, 02:01

La música le sirve de desahogo. Es la forma que tiene de sacar de dentro de sí todas las experiencias que atesora; de compartir las ... emociones que le embargan. Y lo hace sobre el escenario. Marta Casanova (Cartagena, 1993) es la voz que emerge tras Mavica, el proyecto musical que esta joven cartagenera lanzó hace apenas tres años con el apoyo del músico y productor Pablo Serrano, y con el que este sábado se presenta –19.30 horas– en el Nuevo Teatro Circo de Cartagena, dentro de la programación especial del 50 aniversario del espacio. Interpretará 'Gone' y 'Send me to the water', sus dos EP ya publicados, y algunas de las canciones que darán forma a su primer álbum, que espera finalizar a la vuelta del verano. Mavica suena a pop, folk y electrónica: «He aprendido a mezclar colores», cuenta.

Publicidad

–¿Qué le ilusiona de su concierto en Cartagena?

–Volver a mi ciudad. En Cartagena apenas he tocado un par de veces: hace dos años en La Mar de Músicas, y el verano pasado en [el programa 'Xtraordinary Nights' de] El Batel. Me emociona poder encontrarme con gente que conozco de toda la vida que, a lo mejor, nunca me ha visto encima de un escenario.

«Me emociona poder encontrarme con gente conocida que nunca me ha visto en un escenario»

–¿Qué es, para quien no conozca su proyecto, Mavica?

–Mis inicios en la música fueron como cantautora, y poco a poco he ido desarrollando más ese sonido hacia algo más pop, electrónico y folk. Eso es Mavica.

–¿La música siempre le interesó como profesión?

–No. Empecé con la guitarra bastante tarde, en comparación con otros amigos que llevaban en el conservatorio desde que eran niños. En mi caso, entendía la música como una forma de expresarme, e incluso de desahogarme, pero nunca pensé en ello como una profesión. Fue en Berlín [donde vivió unos años] cuando decidí que era esto lo quería hacer el resto de mi vida.

Publicidad

–¿Qué cuentan sus canciones?

–Experiencias que me han pasado desde que empecé a tocar. Mi nuevo disco habla, sobre todo, de esos altibajos en los que te encuentras a menudo seas artista o no. De modo que, un día puedes sentir que estás en la cima y todo es maravilloso, y al día siguiente creer que el mundo se te cae encima.

–¿Qué significado tiene para usted la música?

–Se ha convertido casi en una terapia, en una forma de expresión que no existe de otra manera. Es increíble lo que se puede transmitir, no solo con una letra, sino con todo lo que hay alrededor.

Publicidad

–En su caso, ¿qué transmite?

–Lo que soy, sin más pretensiones. Y honestidad. También emociones que llegan a la gente de muchas maneras diferentes, y eso es lo bonito de un proyecto: tú escribes una letra que para ti tiene un significado, pero cada uno la puede interpretar a su modo y llevarla a su terreno, de modo que sienta lo que está escuchando de una forma más propia. Eso es increíble.

«Si antes tenía una paleta de colores primarios, ahora he multiplicado por mil esa paleta»

–¿Qué ha sido bonito en este proceso y qué es especial?

–Lo más bonito ha sido ir descubriéndome como artista. Conocer cosas que hace cuatro o cinco años creía impensables, como el proceso de grabación, mezcla o masterización de un álbum, y que ahora son parte de mí y, además, las necesito porque me las pide el cuerpo.

Publicidad

–¿Ha sido una sorpresa?

–Sí, sobre todo ver cómo la música está conectada con todas las artes, y cómo he podido unir a ella mi pasión por la moda o por el baile, que también me gustan mucho. A lo largo de este camino he ido juntando varias cosas; al final, todos estamos un poco en el mismo barco.

–¿Qué siente cuando canta?

–Que me estoy liberando de muchos sentimientos, y me gusta pensar que la gente recibe y percibe esa energía.

Sin prejuicios

–Prepara álbum, ¿cómo será?

–Todo lo que escribo es superhonesto y sale del corazón. Y creo que este disco elimina todas las barreras y prejuicios que hay respecto al pop, a la música electrónica o al cambio de estilo; a la evolución en sí misma. No he querido cerrarme puertas a la hora de componer y tampoco he querido condicionarme por cosas que me cohibían o prejuicios a cantar algo muy pop, o algo que, quizá, la gente no iba a entender.

Publicidad

–¿Cómo ha conseguido romper esas barreras?

–Vivir en Londres [donde materializó su primer EP] y en Berlín me permitió abrir un poco más la mente. Escuchar a otra gente hacer cosas diferentes a lo que yo hacía y me hizo entender que yo también podía hacer lo que quisiera sin miedo a que me juzgaran, por lo que si antes tenía una paleta de colores primarios, ahora esa paleta se ha multiplicado por mil y he aprendido a mezclar los colores. Ahora hago cosas totalmente diferentes a lo que hacía al principio.

–¿Tiene fecha para el álbum?

–Todavía no. Quiero terminar de mezclarlo y producirlo para septiembre o noviembre y lanzarlo cuando empiece a llegar de nuevo el calorcito el año que viene. Es un disco para el verano.

Noticia Patrocinada

–¿A qué aspira?

–Tengo muchas ambiciones y soy muy ambiciosa con respecto a la música, pero para mí lo más importante es poder vivir de ella y de las cosas que me encantan; ya sea de los conciertos, de los trabajos que publique o de otras cosas relacionadas. Quiero vivir bien haciendo lo que más me gusta.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Prueba LA VERDAD+: Un mes gratis

Publicidad