Paz Prendes: «Ahora el acoso no termina al salir de clase»

Si es un menor el que sufre, ni siquiera es necesario poner nombre al protagonista de la historia para sentir esa tristeza que encoge por dentro. Es fácil sentir empatía por alguien en edad de disfrutar de la vida sin complicaciones, que en cambio vive cada día como una horrible pesadilla. Escrito negro sobre blanco parece sencillo, pero la realidad es que a diario miles de niños de todo el mundo tienen que convivir con el acoso al que otros como ellos les someten y al que muchos adultos todavía llaman 'juego de niños'.

El acoso escolar o bullying se da tanto en colegios públicos como privados, en países desarrollados y subdesarrollados, en el hemisferio Norte y en el Sur; en definitiva, a lo largo y ancho del planeta y puede provocar en quienes lo sufren enfermedades tales como la depresión, la ansiedad, la anorexia... incluso llegar al extremo de quitarse la vida, si no se detecta a tiempo.

Hoy existe una mayor concienciación sobre este asunto al tiempo que las nuevas tecnologías y su uso desde edades muy tempranas han llevado el problema a otra dimensión: «Ahora el acoso por parte de los compañeros no termina al salir del colegio, sino que continúa en casa a través de internet», explica la catedrática de Didáctica y Organización Escolar de la Universidad de Murcia, Paz Prendes.

El Grupo de Investigación de Tecnología Educativa, que ella dirige desde 2007, también trabaja sobre este tema que forma parte de la lectura negra que se hace de las tecnologías por un uso inadecuado. El proyecto DISABUSE, iniciado recientemente y financiado por la Unión Europea, está coordinado por la Universidad de Dublín (Irlanda) y en él participan Italia, Portugal, Irlanda y España.

«Es un problema que afecta por igual a todos los países europeos, de ahí que exista gran interés porque se investigue más en torno al mismo. El objetivo del proyecto, que arranca en el curso 2018/2019, es formar tanto a profesores como a familias y profesionales de Secundaria para la detección, prevención y actuación en situaciones de acoso y ciberacoso, así como formar a alumnos para que conozcan qué tipo de situaciones son inadecuadas», expone la catedrática a 'La Verdad'.

Para desarrollarlo con éxito cuentan con la colaboración del Servicio de Atención a la Diversidad de la Consejería de Educación de Región de Murcia. Se arrancará con un proceso de 'pretest' seguido de talleres y cursos que se van a impartir a profesores, alumnos y familias a los que posteriormente realizarán un 'postest' comparativo de cuyo análisis se extraerán conclusiones para comprobar si ha sido efectivo y recomendaciones útiles para profesores, alumnos, familias y otros agentes educativos.

El equipo de Tecnología Educativa de la Universidad de Murcia se centra desde hace más de tres décadas en todas aquellas innovaciones que llegan a las aulas. «Hubo un momento en el que los protagonistas eran el retroproyector, los diaporamas o los libros de texto, hoy en día todo es digital», señala. «En los últimos años, la Tecnología Educativa es uno de los ámbitos de trabajo con mayor interés en educación. Ahora el uso educativo de las TIC no es solo cuestión del maestro en el aula, sino también de las familias. Se trata de herramientas que trascienden las paredes de las aulas, como ocurre con el uso de los móviles o las redes sociales. Ya los niños tienen dispositivos más avanzados que los padres, por lo que su impacto sobrepasa el ámbito de la pedagogía y acaba siendo una creciente preocupación social: el cómo usamos las tecnologías en nuestras vidas».

Un área de investigación que en su equipo arrancó en los años 90 coincidiendo con la llegada de internet a España, pero que no para de crecer por el enorme interés que despierta. Trabajan sobre las TIC en educación: cómo se usan, cuándo se usan, para qué, qué impacto tienen... Asegura Paz Prendes que «no todo es maravilloso ni resuelve todos los problemas de la educación, pero han llegado para quedarse y hay que avanzar con ellas y aprovechar su potencial para la educación o nos quedaremos atrás». Advierte de que «hay que formar ciudadanos que sepan vivir en la sociedad a la que se van a enfrentar, por lo que, si el sistema social está impregnado de tecnologías, la escuela tiene que saber cómo usarlas y formar a los ciudadanos para emplearlas de modo responsable».

Atendiendo a todo ello y al hecho de que los profesores demandan formación, los orientadores quieren estar informados y los ciudadanos quieren estar en redes sociales, la Universidad de Murcia imparte el Máster Interuniversitario online en Tecnología Educativa orientado a todos aquellos interesados en saber usar las tecnologías en relación a la enseñanza online o 'e-learning': cómo impartir cursos, qué impacto tienen en los alumnos, como ejercer el rol tutorial, diseño de recursos digitales, aprendizaje colaborativo, etc. Esta oferta formativa tiene su continuidad en el programa de Doctorado en Tecnología Educativa, también interuniversitario y online.

Tal y como está planteado el sistema educativo español, no es hasta el bachillerato (en torno a los 16 años) cuando los estudiantes deben elegir un itinerario (de ciencias o de letras) que les facilite el acceso a la universidad. No obstante, diversos estudios han puesto de manifiesto que es entre los 6 y los 12 años cuando suelen aparecer los primeros signos de rechazo hacia algunas asignaturas, principalmente relacionadas con la ciencia y las matemáticas.

Con el objetivo de desarrollar las competencias científicas en los alumnos de Primaria, el grupo de Tecnología Educativa de la Universidad de Murcia participa en un proyecto europeo junto a centros de Portugal (coordinador del trabajo), Grecia y Lituania.

«Se van a diseñar actividades y experiencias para las que los profesores de Primaria usen tecnologías y material que puedan tener en el aula para que durante el curso vayan trabajando con los alumnos las ciencias, pero desde un modelo de aprendizaje activo en el que los alumnos toquen, vean, colaboren...», según la directora del grupo en la UMU, Paz Prendes. En la Región de Murcia se contará con la colaboración del Servicio de Atención a la Diversidad de la Consejería de Educación.

No se busca simplemente innovar usando las TIC, sino que es el modo de usarlas lo que lo convierte el proceso en innovación educativa, se cambia la metodología y se cambian los roles del alumno y del profesor.