Una mujer con mascarilla en una foto de archivo. EP

Los médicos alertan de un problema de salud causado por el uso de la mascarilla

Un grupo de expertos ha detectado un aumento de casos en sus consultas a raíz de tener que llevar de forma obligatoria la protección facial contra el coronavirus

LA VERDAD

Lunes, 22 de febrero 2021, 13:33

Las mascarillas que se usan para evitar contagios de coronavirus también tienen sus inconvenientes al provocar otros problemas de salud no deseados. Así lo ha alertado el Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología (SEN), que reconoce en un estudio que la presión que ejerce la protección facial al ajustarse al rostro puede ser un factor que cause cefalea o empeoramiento de un dolor de cabeza previo.

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Desde la SEN informan de que más de cuatro de millones de personas padecen este tipo de enfermedad neurológica en España, un millón de ellas de forma crónica, por eso han publicado un documento específico con recomendaciones sobre cómo usar la mascarilla si se padece de dolores de cabeza, ya que en los últimos meses se ha disparado el número de personas que piden un certificado médico para no usar el tapabocas por esta razón. «La aparición de estos síntomas no exime del cumplimiento de la Orden SND/422/2020, que ha establecido el uso generalizado de mascarillas en la población española como medida frente a la Covid-19. Por lo tanto, la aparición de esta cefalea asociada al uso de mascarilla no es un motivo de salud justificado para eximir su uso obligatorio», detallan desde la SEN al diario SUR.

Por todo ello, los expertos recomiendan modificar la forma en la que se lleva la mascarilla si se padece de cefaleas, aunque siempre siguiendo las indicaciones del fabricante. Además, invitan a la población a encontrar un modelo de mascarilla que mejor evite los síntomas del dolor de cabeza, así como a reducir el tiempo de uso de las protecciones faciales en la medida de lo posible.

Las cefaleas, potenciadas en muchos casos por el uso de la mascarilla, ocasionan una limitación importante en las personas que la sufren, llegando a disminuir su actividad en más del 50% de las ocasiones. Entre un 20% y un 30% de los pacientes requieren reposo en cama. «Estas crisis provocan un gran impacto en el funcionamiento diario del paciente, tanto en aspectos físicos, emocionales y sociales como con la familia, trabajo y relaciones sociales», indican desde la SEN. «Algunos pacientes presentan ansiedad anticipatoria, lo cual repercute en su estado de ánimo, generando mayor ansiedad y agravando la enfermedad», agregan.

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