La falta de puntería frustra a un Real Murcia superior
El equipo de Fran Fernández, que puso toda su artillería sobre un césped que no estaba a la altura, disfrutó de las mejores ocasiones ante un Fuenlabrada que acabó pidiendo la hora
Era el día para pegar un puñetazo en la mesa, para mostrar definitivamente la candidatura al primer puesto, al ascenso directo a Segunda. Visto lo ... visto hasta ahora, el Real Murcia tiene potencial más que suficiente pero debe funcionar de forma precisa. Llegó al choque frente al Fuenlabrada con un horizonte esperanzador. Primero por su buen momento, tras dos victorias seguidas, y después porque la jornada del sábado le dejó tres regalos: los empates del Antequera y el Betis Deportivo ante el Ceuta y el Marbella, y a última hora la derrota del Atlético de Madrid B, rivales directos de la zona alta que dejaban todo en bandeja a los granas para situarse a un punto del liderato.
Publicidad
Pero no logró sacar más que un empate del Fernando Torres, le resultó imposible, aunque mereció más. Fue de los dos equipos en el que más lo intentó, sobre todo en la primera y la última media hora del encuentro, pero se estrelló contra un Fuenlabrada solvente en casa que sacó bandera blanca mucho antes del pitido final, cuando veía que el equipo grana se le echaba encima una y otra vez. Finalmente el duelo acabó en tablas tras un combate intenso disputado en cada centímetro de un campo estrecho que no invitaba a jugar al fútbol. En un duelo que no fue brillante y que reclamaba efectividad, el Real Murcia no acertó pero sigue una semana más sin perder y demostrando que quiere más, que sigue creciendo, que sueña con el ascenso.
Fuenlabrada:
Lucas, Álvaro García, Alba, Barbu, Moyano, Ale Galindo (Sergio Aguza, 85), Bilal, Abde, Sangaré (Manu Garrido, 63), Curras (Nene, 66) e Ilies (Marcos Mauro, 85).
0
-
0
Real Murcia:
Gazzaniga, Jorge Mier (David Vicente, 74), Saveljich, Alberto González, Cadete, Yriarte, Boateng (Toral, 83), Pedro León (Carlos Rojas, 56), Loren Burón (Larrea, 83), Juan Carlos Real y Pedro Benito (Alcaina, 56).
-
Árbitro: Ruiz Álvarez, asturiano. Mostró amarilla a Currás, Bilal, Abde, Sangaré, Jorge Mier y Ale Galindo.
-
Incidencias: Campo Municipal Fernando Torres, más de tres mil espectadores, unos quinientos aficionados del Real Murcia.
Cambios insospechados
Fran Fernández volvió a sorprender con su alineación en el duelo de Fuenlabrada. Movió la línea defensiva sentando a David Vicente y llevando a Jorge Mier desde la izquierda al puesto de lateral derecho, devolviendo así la titularidad a Cadete tras varias semanas castigado por su propensión a descuidar la defensa y lanzarse locamente al ataque. El defensa madrileño debía demostrar en esta nueva oportunidad que puede seguir de grana antes de que arranque el inminente mercado invernal. Además Boateng suplió en la medular al sancionado Moha, mientras que Pedro León y Juan Carlos Real volvieron a compartir titularidad en detrimento de un Rojas que volvió al banquillo. Loren y Benito volvieron a repetir arriba en un equipo que debía estar listo para pelear en un terreno de juego que no mostraba las condiciones mínimas exigibles para una categoría como ésta.
Pero no había excusa y el Real Murcia olvidó las excusas y se adaptó rápido al partido; una guerra de guerrillas, un choque duro en el que iba a ser imposible conducir el balón con normalidad. Pico y pala y trabajo colectivo necesitaban los de Fran Fernández para sumar los tres puntos en un campo donde su rival, además, se había mostrado fuerte en las últimas semanas.
Publicidad
El equipo grana fue mejor desde el principio y dominó la situación. Y a base de saques de esquina generó ocasiones, como la que disfrutó Boateng, que estrelló el balón contra un rival cuando el esférico iba a puerta, e Yriarte, que no acertó a cazar el rechace en el área pequeña. Pedro Benito peleaba por cada balón, haciendo que éste estuviera siempre en el campo de un Fuenlabrada que defendía con dureza, muchas veces por encima de los límites del reglamento. En el minuto veinte, un buen contragolpe armado por Real y Benito no pudo acabar con el remate de Pedro León que evitó un contrario por milímetros. El choque era claramente grana, pero el equipo local comenzó a acercarse a la meta visitante cada vez con más asiduidad, hasta que Abde envió un balón por encima del larguero.
Pero tras unos minutos encorsetado el Real Murcia volvió a desperezarse y a ser dominador a base de presionar arriba y poner en apuros a la defensa y centro del campo del conjunto madrileño. El cuadro de Fran Fernández había sobrevivido gracias al trabajo defensivo de todo el equipo, aunque la pareja formada por Saveljich y Alberto González, que volvió a mostrarse firme en cada acción, era un seguro de vida. A Cadete, que también cumplía atrás, le cayó un balón en el área rival y remató blando con su pierna mala mientras que Loren Burón, a falta de buenos balones y metros para correr, provocó dos tarjetas amarillas en apenas cuarenta y cinco minutos.
Publicidad
El conjunto de Fran Fernández, al que no se le cayeron los anillos a la hora de pelear en un escenario no apto para jugar al fútbol, o al menos al que está acostumbrado en una tercera categoría que debe ser profesional, se fue al vestuario sabiendo que su victoria dependía de seguir firme atrás y de, a falta de espacios, hacer gol en alguna de las jugadas de estrategia de las que iba a disfrutar. Solo se trataba de seguir haciendo lo mismo y ser más efectivo, como lo fue una semana atrás.
Avalancha final
Pero la segunda parte fue igual de trabada que los primeros cuarenta y cinco minutos. El equipo grana no se acercaba con peligro a la meta del Fuenlabrada y Fran Fernández decidió mover el banquillo dando entrada a Alcaina por Benito y a Carlos Rojas por un Pedro León, que se fue ovacionado por el Fernando Torres, tanto por la afición grana como por la local, que reconoció el buen rendimiento que el muleño dio en el último año del equipo madrileño en Segunda.
Publicidad
Los cambios solo llegaron unos minutos antes que Real tuviera el 0-1 en sus botas tras una buena jugada de estrategia del Real Murcia. Con el paso de los minutos el Real Murcia cambió: comenzó a ser un equipo más dinámico y rápido. Mucho más vertical. Loren, que siguió provocando tarjetas, no logró cabecear un buen centro de Rojas, mientras que Alcaina, tras recuperar un balón en un costado, se probó desde lejos, aunque detuvo sin problemas el meta local Lucas Díaz.
Noticia relacionada
Así hemos contado el partido del Real Murcia contra el Fuenlabrada
El choque entraba en el tramo final y al Real Murcia se le escapaba una gran ocasión de sumar su tercera victoria consecutiva y situarse más arriba en la tabla. No renunciaba a ganar, pero su rival era sólido atrás y no le permitía nada. No obstante los murcianos querían la victoria y en un balón colgado por Yriarte al área rival Alberto González remató de chilena y su balón salió pegado al palo derecho de la meta local. A la siguiente, otra vez Real intentó el disparo pero su disparo no fue limpio y se estrelló contra un defensa madrileño. El equipo grana era el que, con diferencia, más apretaba. Las cartas estaban encima de la mesa: el Real Murcia buscaba el gol mientras que el colegiado tenía que llamar la atención al portero local para que sacara más rápido.
Publicidad
El Murcia arriesgaba, y no se le podía echar en cara nada, solo su falta de pegada y no saber aprovechar la acumulación de futbolistas de ataque. Tampoco al entrenador, que también metía a Toral arriba, su último cartucho. El equipo murciano estaba volcado y el Fuenlabrada, empequeñecido por su rival, achicaba agua como podía, y firmaba el empate sí o sí ante un Real Murcia que se fue frustrado del Fernando Torres pero también con la conciencia tranquila.
Prueba LA VERDAD+: Un mes gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión