La calle Ramón Gallud, que estará dentro de la ORA, ya dispone de una zona de estacionamiento regulado. EVA MOYA

La zona azul abarcará el centro de Torrevieja y se activará también en verano en las playas

El Ayuntamiento marca su implantación en 2025; antes deberán aprobar dos ordenanzas y adjudicar a una empresa su gestión e instalación

Lunes, 25 de noviembre 2024, 00:01

El horizonte temporal que el Ayuntamiento de Torrevieja se marca para implantar la zona azul es 2025. La ciudad de la sal es una de las pocas localidades costeras de la provincia que todavía no tiene la ORA implantada, aunque muchos colectivos, en especial los comerciantes, vienen reclamándola desde hace años. Según ha podido saber LA VERDAD, el equipo de gobierno ya tiene definida cuál va a ser esa futura área de estacionamiento regulado. Abarcará la zona centro, pero también se extenderá a las playas durante la temporada alta.

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Así lo confirma el concejal de Seguridad, Federico Alarcón, a preguntas de este periódico. El límite por el norte será la calle San Pascual; por el oeste, la calle del Huerto; por el este, la calle Moriones; y al sur, todo el frente marítimo desde el paseo Vista Alegre hasta Juan Aparicio, pasando por la avenida de la Libertad.

La almendra central es precisamente el espacio al que todos los torrevejenses acuden para hacer sus tareas diarias y donde se encuentra la principal área comercial y de servicios. A menudo, muchos residentes en urbanizaciones y barrios más periféricos toman sus coches para desplazarse a alguna de las calles comprendidas en la futura ORA. El objetivo del ejecutivo es que estas, próximamente, tengan más fácil encontrar un aparcamiento al evitar este sistema que un turismo pueda permanecer semanas estacionado en el mismo punto.

Además, el edil Federico Alarcón avanza que los residentes jugarán con ventaja. A ellos la llegada de la ORA no les afectará. El Ayuntamiento establecerá la gratuidad para los que residan dentro de esa almendra. Solo tendrán que acudir al Consistorio para recabar su tarjeta acreditativa y podrán aparcar sin temor a posibles sanciones.

Esto permitirá, asimismo, que la señalización sea única, en color azul. Algo que, destaca Alarcón, evitará confusiones y malentendidos que sí se dan en otras ciudades con este servicio, donde se diferencian con verde o incluso naranja aquellas áreas para estacionamiento de residentes.

La gran novedad será que la zona azul tendrá una extensión veraniega y también en abril. Y es que el mismo problema de aparcamiento del centro se reproduce en las calles adyacentes a los principales arenales durante la temporada de baño. En este sentido, la primera línea de La Mata, El Cura (de Pedro Lorca hasta la playa) y los Náufragos (desde Maestro Quino, avenida Pinoso y calle José Hodar hasta la playa) también estarán reguladas.

Ordenanzas y contrato

Este es el resultado del proyecto inicial que, casi con toda seguridad, acabará volcado en el pliego del contrato de implantación. Para que al año que viene el servicio esté listo para entrar en funcionamiento, deberán haberse concluido antes una serie de pasos importantes.

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Para empezar, los técnicos están ya trabajando en la redacción de dos ordenanzas. Una es la regulatoria del servicio, donde se expondrán las normas, bonificaciones y exenciones. La otra es la fiscal, donde se establecerá la tarifa. Respecto a estos dos extremos, no hay nada cerrado del todo.

Ambos documentos, una vez redactados, deberán pasar por Pleno. Primero, para su aprobación inicial, donde la oposición podrá presentar enmiendas. Después, se abrirá un periodo de exposición pública, en el que todos los ciudadanos podrán presentar sus alegaciones. El equipo de gobierno, en base a los informes técnicos, decidirá si acepta e integra algunas de las aportaciones ciudadanas y de la oposición antes de someter ambos textos a su aprobación definitiva en Pleno.

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En paralelo, traslada Alarcón a este periódico, se estará redactando el pliego de implantación. En el mismo avanza que se encomendará a una empresa externa la explotación del servicio al contrario que en otras ciudades como Orihuela, donde la gestión está municipalizada.

Asimismo, dentro de esa futura licitación, se incluirán también las obras propiamente dichas para poner en funcionamiento la zona azul, es decir, el repintado de marcas viales en el asfalto y la instalación de las máquinas para el pago y expedición de tiques. También se intentará que se brinde la opción de pago a través de una 'app'.

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La llegada de la zona azul, por otra parte, se tramita en paralelo a otras cuestiones también íntimamente ligadas al tráfico, como es la zona de bajas emisiones, cuya extensión coincide casi prácticamente con la de la ORA. Obligados por ley a su implantación, el ejecutivo ha previsto un área que estará libre de sanciones. Un estudio previo ha descartado grandes niveles de contaminación que justifiquen restricciones al tráfico. No obstante, esa zona estará señalizada y, además, se implantarán medidores de calidad del aire para información de los ciudadanos.

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