Respaldo mayoritario a la declaración como BIC de la procesión del Entierro de Orihuela
Todos los grupos, salvo Cambiemos, apoyan remitir a la Generalitat la solicitud de los Caballeros Cubiertos
El Pleno dará luz verde este mes a elevar a la Generalitat el expediente para la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) de la procesión del Santo Entierro. La propuesta que fue trasladada personalmente por la Hermandad de Caballeros Cubiertos al alcalde, Pepe Vegara, obtendrá el voto favorable de todos los grupos políticos a excepción de Cambiemos, es decir, de 23 de los 25 ediles del Ayuntamiento. Según adelanta a este diario la portavoz de la formación municipalista, Leticia Pertegal, la asamblea de su partido ha decidido apartarse y votar abstención al tratarse de un tema de cariz religioso. «De hecho nosotros ya solemos abstenernos en las votaciones para el nombramiento del Caballero Cubierto», incide.
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La procesión, que se celebra cada Sábado Santo, es la más singular de la Semana Santa oriolana, declarada de Interés Turístico Internacional. El cortejo, en lugar de ser organizado por una institución religiosa, es promovido por el propio Ayuntamiento. En el mismo participan los ediles del Consistorio, además de la Junta Mayor de Cofradías y el obispo de Orihuela.
Además, la procesión cuenta con dos figuras singulares, la del Caballero Cubierto, título honorífico de raigambre medieval que se da a una personas por sus méritos e implicación en la semana de pasión y que ostenta el privilegio de no descubrirse la cabeza al pasar por el interior de la Catedral. Junto a él, desfila La Diablesa, un paso obra de Nicolás de Bussy que contiene la representación de un diablo con pechos. Representa el triunfo de la cruz sobre la muerte y el pecado. Esta escultura, de hecho, ya está declarada BIC desde 2017.
La Generalitat, en estos momentos, es reacia a tramitar este tipo de expedientes. Si bien se ha comprometido a dar un empujón a la declaración del Juzgado de Aguas de Orihuela, todavía continúan en el cajón los correspondientes a la declaración del monasterio de San Juan, en liza desde 2015, y también las imágenes de Salzillo, que esperan en Valencia a su protección desde 2008. El Pleno, de hecho, aprobó recientemente, en marzo, retomar este asunto ante Valencia a instancias de una moción presentada por Cambiemos. Una declaración que podría hacerse incluso extensiva, además, a las otras imágenes que hay del escultor murciano en Callosa y Dolores.
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