Devoción y fervor a flor de piel por La Purísima en Torrevieja

La fe mueve montañas, dice el sacrosanto refranero, y la Purísima mueve a los salineros y a todo un crisol de culturas. Torrevieja, tras un llenazo espléndido el viernes para asistir al encendido de sus luces de Navidad, rendía ayer pleitesía a la Patrona de la sal con la devoción -nunca mejor dicho- a flor de piel.

Un enorme arco de flores blancas de santidad adornaron la ya brillante fachada del templo de la Inmaculada. Y de ello participaron propios y foráneos, músicos y cofrades, religiosos y paganos, todos torrevejenses de corazón con la casta imagen por bandera.

Como un aluvión de fieles, la procesión atravesó la calle Caballero de Rodas desde el Sagrado Corazón con los Hijos de la Inmaculada al frente. Desde el barrio de La Punta hasta el hervidero de las fiestas patronales en La Glorieta, la multitud congregada esparaba para llamar a las puertas del templo y saludar a la Purísima.

En segundos, la imagen, por segunda vez consecutiva, apareció ante el gentío con los atributos e imaginería que siempre la acompaña en su camarín. Una a una, hasta 100 asociaciones desfilaron y mostraron sus respetos hasta dibujar el floral tapiz.

Entre otras, pasaron ante la talla agrupaciones que son vivo testimonio de las esencias y folclore torrevejense, pero, una vez más, la elevada presencia extranjera puso el toque exótico a la fiesta. Las gaitas del centro asturiano, inmersos en plenas fiestas de Santa Bárbara, rindieron tributo a su 'santina' de adopción. Los andaluces hicieron lo propio y sus coros rocieros, guitarra en mano, piropearon a la Patrona con su toque de flamenco, danza, taconeo y mucho arte.

Ya cernido el ocaso, los presentes aunaron sus voces en una para entonar la celebérrima salve marinera sobre los acordes de la coral Manuel Barberá, privilegiada este año con poner la música a uno de los momentos más mágicos del diciembre salinero.

En los próximos días, las fiestas patronales siguen llenando de calor y buen ambiente hasta el último rincón de la ciudad. La jornada arrancará con el 'Diversequión'. Entre las 8.00 y las 16.30, la avenida de la Estación acogerá diana, chocolatada, regalos, comida y las actuaciones de la escuela de baile Paya's y 'Días de Radio', un recorrido por lo más granado del pop-rock español.

La salida cicloturista 'Bisiquión' saldrá por su parte a las 11.00. Desde las 10.00, los interesados podrán inscribirse. Tras el 'tour' por el barrio, la llegada de los competidores será a las 12.30. Todos tendrán su bocadillo de recompensa por el esfuerzo.

A las 12.00 también, pero en la plaza Miguel Hernández, habrá charamita inclusiva. A las 12.30 y a las 17.30, Lily, el Lobo y su gamberra comparsa volverán a recorrer las calles del centro. A las 17.00, la comunidad nórdica protagonizará el tradicional encendido de su árbol de Navidad en la plaza de la Constitución. Mañana, además, será la última oportunidad para ver el musical de 'Charly y la Fábrica de Chocolate' en el Teatro Municipal a las 17.30 horas.

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