Medio Ambiente busca una empresa que controle los vertidos de las industrias

El objeto concreto de esta contratación, dependiente de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería Pesca y Medio Ambiente, es el suministro de «la asistencia técnica que realiza el control de vertidos de las industrias de la Región», según la información facilitada por el organismo oficial. «La finalidad de esta vigilancia y seguimiento llevado a cabo por Esamur, a través de la empresa concesionaria, es realizar una labor de prevención de la contaminación en origen, garantizando que las empresas aplican los tratamientos adecuados conforme a la ley y, de esta forma, asegurar que llegan de forma óptima a las estaciones depuradoras de aguas residuales [conocidas por las siglas EDAR] para su correcta depuración».

Entre las funciones de la empresa que resulte seleccionada en la licitación se encuentra, entre otros, el desarrollo de un plan de inspección, visitar industrias, tomar analíticas, comprobar los cánones de saneamiento, las lecturas de agua y realizar o investigar informes.

La nueva licitación llega con novedades respecto a otras anteriores, como la exigencia para la concesionaria de incorporar labores de sistemas de información geográfica de las instalaciones, de revisar la población conectada y de desarrollar la red de control online «a través de la instalación, mantenimiento y ubicación 24 horas al día los 365 días del año», lo que permite «la monitorización de los parámetros en cualquier momento». Además, el servicio licitado «incorpora el seguimiento de los nuevos contaminantes, conforme a los criterios que establece la Unión Europea». Además, se contempla un aumento de los equipos y medios y una mayor dotación de personal. El departamento de control de vertidos de Esamur realizó el año pasado 855 visitas a industrias para controlar los vertidos que realizan a la red de saneamiento y prevenir la contaminación en origen. Además, completó 505 análisis.

Con estas inspecciones, Esamur trata de garantizar la salud de las personas y la sostenibilidad del medio ambiente, al paso que protege las estaciones depuradoras y asegura su correcto funcionamiento para asegurar las tareas de depuración y posterior reutilización de sus aguas. Con el control de vertidos también se reducen los costes de los tratamientos para la depuración y se favorece el reciclaje dentro de la economía circular.