Borrar
Una agente de la Policía Local de Yecla observa un camino anegado, ayer por la mañana. Á. Alonso
Un dispositivo adecenta las vías rurales afectadas por la tormenta en Yecla

Un dispositivo adecenta las vías rurales afectadas por la tormenta en Yecla

El Consistorio despliega a un grupo de operarios para rehabilitar las zonas más dañadas por la tromba de agua del lunes

Ángel Alonso

Miércoles, 7 de junio 2023, 01:19

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Los estragos de la lluvia del pasado lunes quedaron ayer patentes en distintos puntos de Yecla. El municipio amaneció con caminos destrozados, vallas de parcelas por los suelos y vecinos limpiando fachadas de viviendas. El día después de la riada sirvió para comprobar los destrozos causados por los 62 litros por metro cuadrado que cayeron en apenas quince minutos en zonas próximas a la carretera que une Yecla con la localidad albaceteña de Almansa.

Las mediciones de precipitaciones confirmaron la virulencia con la que descargó la tormenta. Hasta 122 litros por metro cuadrado llegaron a registrarse en los momentos de mayor intensidad en los sistemas de medición. Una masa de agua que provocó principalmente daños por escorrentías. Algunos vecinos que viven en casas de campo tuvieron que renunciar ayer a ir al trabajo, ya que los caminos rurales de acceso a sus viviendas estaban completamente destrozados y se hacía impracticable su uso con coches.

La zona afectada, en un primer cálculo, abarcaría unos 200 kilómetros cuadrados situados al norte del término municipal de Yecla. El Ayuntamiento desplegó a primera hora de la mañana a los operarios de la brigada municipal de obras para ir adecuando las zonas más afectadas. «No vamos a poder resolverlo todo hoy. Hay caminos intransitables por donde viven algunos vecinos», explicó la alcaldesa en funciones, Remedios Lajara, que visitó la zona para comprobar 'in situ' los daños. «Si no podemos resolver todo esto con nuestros medios, no dudaremos en pedir colaboración a la Comunidad Autónoma», añadió. La primera edil electa se congratuló porque, «pese a la fuerza del agua y las consecuencias que se ven en las zonas rurales, no hemos tenido que lamentar daños personales».

Los sistemas de medición registraron hasta 122 litros por metro cuadrado en los momentos de mayor intensidad

No hubo pedrisco

Los cultivos autóctonos soportaron bien la fuerte tromba de agua, explicaron fuentes del sector agrario consultadas por este diario. Tanto el olivar como la viña no se vieron afectados porque el temido pedrisco no hizo acto de presencia. «Lo peor son los daños en los terrenos por la fuerza del agua», explicó la responsable local del sindicato Coag, Adela Bernabéu. Añadió que «el agua es bienvenida», aunque algunos cultivos seguían ayer anegados.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios