Una nueva oleada de robos en comercios sacude Roldán

En el caso del bar Los Mellizos, ha sido atacado por partida doble. La primera vez, a comienzos de enero, y la segunda, en los últimos siete días de ese mes. Los ladrones, dos encapuchados, según explica Raúl, el propietario, actuaron de la misma manera, «forzando la persiana del establecimiento de madrugada», para llevarse la recaudación de la máquina de tragaperras. «Están empezando otra vez a entrar en los negocios, porque por la noche no hay ninguna patrulla de Guardia Civil o de la Policía Local por el pueblo y los ladrones campan a sus anchas».

El asadero de pollos Anita fue otro de los establecimientos afectado y donde los ladrones se llevaron el dinero de la recaudación de la caja registradora, además del efectivo que había en el cajón de una máquina de bolas. «Fue a las tres de la madrugada. Doblaron la persiana y entró uno de ellos, que se encargó de forzar los dos cajones y llevarse el efectivo», explica Raquel, una empleada.

La céntrica ubicación de la peluquería Mari, en la avenida de Torre Pacheco de la localidad, no disuadió a los encapuchados para entrar en el negocio y sustraer el dinero que tenía en la caja. El hermano de la propietaria vio una luz en el interior al pasar por el negocio a las seis de la mañana y avisó a su familiar. «Vio una ventana abierta y una luz azul, que yo pienso que sería la de un móvil. Me llamó y me dijo que creía que me habían entrado otra vez, porque ya me robaron el año pasado. Cuando llegué a la peluquería vi que me habían quitado lo que había en la caja registradora. Lo que más rabia da es que roban a autónomos a los que cuesta mucho abrir el negocio todos los días para llegar a fin de mes», lamenta Mari, la propietaria.

El sector de la hostelería no se libra de los asaltos y los dueños de la cafetería Café del Tiempo y del pub Buggatis Bar también han sido víctimas de esta oleada de robos. Este último negocio, situado en la calle Magallanes, sufrió el asalto más reciente. El pasado sábado forzaron una persiana y rompieron una cristalera para acceder al establecimiento. Una vez dentro, reventaron una máquina tragaperras para apoderarse del dinero y se llevaron dos televisiones. En el asedio, destrozaron parte del mobiliario del local.

Además de los asaltos a negocios, desde la asociación de vecinos de Roldán denuncian sustracciones de vehículos, que los ladrones utilizan en sus asaltos, como un camión robado en la empresa Mármoles Roldán. Asimismo, desde el colectivo alertan de la actividad de una banda que asalta a los vecinos en plena calle para robarles la cartera o joyas con el método del 'abrazo cariñoso'. «Sus víctimas son personas mayores que se confían», denuncia Antonio Martínez, presidente de la asociación.

Además de esta agrupación, otras asociaciones del municipio han puesto el grito en el cielo por la nueva ofensiva de las bandas. El pasado lunes, afirma Martínez, hubo una reunión con el alcalde de Torre Pacheco para trasladar la preocupación existente por el incremento de la delincuencia y la falta de seguridad de la zona.

«No nos dio soluciones. Nos dijo que había policías locales suficientes las veinticuatro horas del día, pero no es así. Llevamos tiempo reclamando un cuartel, porque tampoco hay patrullas de la Guardia Civil, que tiene una plantilla mermada en Torre Pacheco. Actualmente, estamos desamparados», concluye.

La pedanía de Roldán es una de las localidades de la Región donde la delincuencia ha golpeado con más fuerza en los últimos años. La población ha sido tanto lugar de residencia de integrantes de bandas de ladrones, como objetivo de los golpes de los propios grupos criminales. En la última operación de la Guardia Civil, denominada 'Game Rol', los agentes desarticularon en marzo del año pasado una organización criminal, una de las más importantes desmanteladas en los últimos años en la Región, que cometió hasta 80 robos con violencia en establecimientos públicos y viviendas de la comarca del Campo de Cartagena.

En total, se detuvo a 16 personas y los agentes incautaron, en una macrorredada con 17 registros en Roldán y Lo Ferro, donde vivían los arrestados, un revólver detonador, armas blancas, 26.000 euros, 600 cajetillas de tabaco, joyas, marihuana y éxtasis, entre otros elementos. Además, se recuperaron 24 coches robados. El primer robo con violencia tuvo lugar en agosto del 2022, precisamente, en un salón recreativo de Roldán. A partir de ese robo, le siguieron una treintena de asaltos a farmacias, supermercados, estancos, locutorios, salones recreativos y viviendas, siete de ellos cometidos en Roldán, pero también en Torre Pacheco, Balsicas, San Javier, San Pedro del Pinatar; las diputaciones cartageneras de La Palma y La Puebla, y las pedanías murcianas de Sangonera la Seca y Avileses. El Juzgado de Instrucción número 7 de San Javier decretó el ingreso en prisión preventiva de once de los detenidos y el resto quedó en libertad.