La ministra Teresa Ribera convoca a los regantes, en guerra por el Plan del Tajo

La ministra y los usuarios del Trasvase se verán las caras después de la primera reunión que mantuvieron en Madrid el pasado día 3, tras los ecos de la manifestación que recorrió el paseo de la Castellana. En aquel encuentro quedó clara la posición de los regantes: apoyarán la desalación, siempre que se abarate el precio, pero no cederán con el aumento del caudal ecológico en Aranjuez. El Ministerio hizo oídos sordos a esta última demanda y dos semanas después presentó el Plan del Tajo con un incremento gradual del flujo para alcanzar los 8,6 metros cúbicos por segundo –su propuesta inicial– en el año 2027.

Aunque no ha trascendido el orden del día, la reunión de esta tarde se produce en un clima previo de desacuerdo. El Ministerio defenderá probablemente la metodología que ha empleado para fijar las nuevos caudales, la cual contiene fallos y errores a juicio de los regantes y del Círculo por el Agua, que estudiarán si existe base para presentar una querella por presunta prevaricación contra el departamento de Ribera, que fue avisado de esta supuesta irregularidad.

Asimismo, la Dirección General del Agua quiere hacer partícipes a los regantes de la programación para desarrollar las inversiones en desalación, que se financiarán con los fondos europeos de recuperación, de los que el Gobierno central espera captar el mayor porcentaje de subvenciones para un programa presupuestado en 500 millones de euros. Prevé la ampliación de las desaladoras de Torrevieja, Águilas y Valdelentisco en unos 100 hectómetros adicionales, así como el uso de energía fotovoltaica.

También espera financiar la interconexión de las desaladoras con los mismos fondos de la UE, como explicó el director general del Agua, Teodoro Estrela, el pasado domingo en LA VERDAD, quien avanzó que querían reunirse de inmediato con los regantes para poner en marcha estos proyectos. También dijo que esperan abaratar el precio del agua desalada en 10 céntimos el metro cúbico, un 20% aproximadamente de la tarifa actual.

El Sindicato de Regantes no piensa ceder con el caudal ecológico del Tajo y presentará documentos y estudios que demuestran, a su juicio, que es innecesario incrementarlos. También considera que no hay capacidad de desalación para cubrir el déficit de la cuenca.