La resistencia naranja

Así que no queda otra que intentar recomponerse y mirar al futuro. Y eso es lo que tratan los miembros de la dirección regional que decidieron permanecer en sus puestos y no seguir los pasos de la excoordinadora. La resistencia naranja en la Región.

Desde la renuncia de la lideresa, en Centrofama no se había movido ni un alma a la espera de que Madrid designase al nuevo coordinador. Pero este nombramiento, que se anunciaba como inminente, aún no se ha producido, y todo apunta a que se pospondrá a septiembre. Ante esta tardanza, los miembros de la Ejecutiva decidieron que era hora de volver a ponerse en marcha y celebraron el pasado miércoles una reunión, la primera desde la marcha de Martínez Vidal, en la que se marcaron las líneas políticas de los próximos meses.

El acuerdo de mayor calado fue la decisión de sumarse a la iniciativa legislativa popular (ILP) que busca dotar de personalidad jurídica al Mar Menor, con el objetivo de proporcionar una mayor protección a este ecosistema degradado. Esta propuesta, que parte de una plataforma ciudadana de la Región, fue admitida a trámite por la Mesa del Congreso de los Diputados y requiere de medio millón de firmas antes de octubre para poder tramitarse.

Ciudadanos encuentra aquí una ocasión de oro para llevar en práctica esa apuesta verde que planteó Inés Arrimadas en la última convención nacional. En línea con los liberales de Alemania, Cs pretende enarbolar la bandera de la defensa del medio ambiente y la economía sostenible, por lo que entrará en competencia con el proyecto de Íñigo Errejón que en la Región de Murcia abandera Óscar Urralburu.

Además, a principios de agosto se tiene intención de celebrar un encuentro telemático con afiliados, con el fin de que asistentes murcianos a esta convención nacional celebrada en Madrid a mediados de julio expliquen los nuevos planteamientos programáticos. El dirigente regional que mayor peso tuvo en esta cita fue José Luis Ros Medida, portavoz de la formación naranja en San Pedro del Pinatar.

Otra de las apuestas que salió del cónclave de Madrid fue la del municipalismo. A Ciudadanos, tras su salida abrupta del Gobierno autonómico, no le queda otra en la Región que pegarse al máximo al terreno a través de sus concejales en los ayuntamientos, como los citados ejemplos de Murcia, Cartagena y Lorca. Hace unas semanas se produjo un hecho que llamó la atención. Ediles de Murcia posaron juntos en fotografías con miembros de la dirección regional en la protesta contra la LGTBIfobia celebrada en la capital. Contrasta con lo que pasó en las elecciones de Madrid, donde los concejales afines a Mario Gómez y los miembros del aparato de Centrofama que ejercieron de apoderados en las mesas fueron cada uno por su cuenta.

En Cs son conscientes de que, si no cambia mucho la cosa en estos dos años, lo tendrá complicado para volver a ser decisivos en la gobernabilidad de la Región. Pero pueden jugar sus bazas en los municipios, siempre que consigan visualizar éxitos de su gestión. Además, recuerdan algunos en Centrofama, los tiempos políticos actuales son muy cambiantes. «Todo el mundo se reía de Pedro Sánchez cuando, tras su derrota en el Comité Federal, dijo que iba a recorrerse España en su coche en busca de apoyos para regresar a la secretaría general del PSOE. Y hoy es el presidente del Gobierno», recuerda un miembro de la Ejecutiva.

La dimisión de Martínez Vidal se hizo oficial el 4 de julio y, desde entonces, no cesan las quinielas sobre su posible sucesor. O más bien sucesora, pues la favorita es María José Ros Olivo, actual secretaria de Organización. Es una afiliada desde hace muchos años, que siente los colores naranjas y que conoce muy bien los entresijos de la formación.

A María José Ros se la tenía como fiel escudera de la excoordinadora, que la incluyó en el organigrama de la Consejería de Empresa y la promocionó en el partido. Sin embargo, no renunció a la vez que ella y tampoco está en el equipo que Vidal y Juanjo Molina se quieren llevar con ellos al Grupo Mixto. Según ha podido saber LA VERDAD, los diputados quieren contratar con su asignación a tres personas, y ninguna de ellas es Ros Olivo ni Gabriel Sánchez Torregrosa, el otro pilar orgánico de Cs en la Región.