Los regantes del Trasvase acentúan su rechazo a los «precios brutales» de la desalación

Jiménez hizo estas declaraciones tras una reunión con el consejero de Agricultura, y destacó que la desalación «es «la única opción que baraja el Ministerio para resolver el complicado escenario que está planteando de caudales ecológicos en el Tajo». Añadió que el Gobierno central «lleva dos líneas de trabajo y ambas confluyen en un mismo hecho, finiquitar en buena parte el Trasvase Tajo-Segura». Una de esas líneas es «acabar con las tensiones políticas en la vecina Castilla-La Mancha», lo cual «conduce inequívocamente a ir recortando drásticamente el Acueducto», aseguró.

La segunda línea a la que hizo referencia Jiménez «es la apuesta por la desalación como única opción en materia de agua para esta cuenca». A su juicio, «no es necesario implementar caudales ecológicos por encima de lo que ya estaba pasando en algunos puntos como Aranjuez».

Para el presidente de Scrats, el Gobierno central ha introducido la desalación «con calzador». «Se nos pide que a toda marcha firmemos las comunidades de regantes unos convenios que van a vincular nuestra vida con la desalación en el futuro».

El máximo representante del Scrats se mostró convencido de que también la sociedad civil «se va a enfrentar a precios que van a afectar a su bolsillo, porque una mayor dependencia de la desalación, de un recurso que tiene como origen principal la energía eléctrica, nos puede enfrentar en un futuro a precios que están por ver». Señaló que en «esta batalla» va a estar «enfrente del Ministerio. Decimos sí al agua, pero no a cualquier precio». En este sentido, exigió que se aplique la ley, que propone 30 céntimos por metro cúbico para el agua desalada.

Expresó su malestar «por tener que solicitar algo que ya está reflejado en la normativa vigente, máxime cuando nuestros competidores, que son los compañeros del resto del país, están pagando una media de 3 a 4 céntimos el metro cúbico». Los precios por el agua desalada que se pagan en la Región, Alicante y Almería harían «inviable» la agricultura de futuro, apuntó

Aseguró que la comunidades de regantes integradas en el Sindicato no van a firmar las condiciones impuestas por el Ministerio, al menos hasta que este no responda a la misiva que el Sindicato le remitió para expresar su malestar. «Nos costa que están trabajándola con una serie de condiciones, y en el momento en que estas se centren, firmaremos», apostilló Jiménez. Los miembros del Scrats se reunirán el lunes con los representantes de las organizaciones agrarias para explicarles el conflicto generado con la desalación.