Las oposiciones de profesor serán en 2021 con más plazas

Los opositores murcianos que llevan meses, cuando no años, preparando las pruebas para lograr una plaza de profesor, tendrán que esperar un año más. La Consejería de Educación y Cultura decidió ayer suspender definitivamente la celebración de las oposiciones de Secundaria, prevista para el próximo 20 de junio, «tras contar con el máximo consenso de las comunidades autónomas vecinas a la Región de Murcia». Así, la mayoría de las regiones que habían convocado oferta de empleo han decidido suspenderla, salvo Madrid, Cataluña, Galicia y el País Vasco, que han dejado la puerta abierta.

Las oposiciones anuladas en Murcia se convocarán en el año próximo, lo que obliga a su vez a posponer la convocatoria de Primaria prevista para 2021 al año 2022, «lo que deberá analizarse y consensuarse con el resto de comunidades y con los agentes sociales», apuntó ayer la Consejería de Educación.

La oferta de empleo en la Región, que contemplaba 575 plazas de profesor de Secundaria y FP, queda suspendida, y el año próximo se convocará de cero. Es decir, las condiciones pueden variar, y quienes ya se habían inscrito tendrán que hacerlo de nuevo. A cambio, la Consejería de Educación dijo ayer que la oferta se ampliará, ya que en los próximos meses se contabilizarán nuevas jubilaciones de profesores que habrá que sumar a la oferta, y que según los cálculos de los sindicatos, pueden llegar a añadir cincuenta más. «Es previsible que el hecho de tener que trasladar la celebración al verano de 2021 conlleve un aumento de plazas debido a las jubilaciones que se puedan producir, algo que, en cualquier caso, sería objeto de negociación con los agentes sociales», confirmó Educación.

La suspensión de las oposiciones, que se iban a celebrar en Murcia el 20 de junio, está provocada porque las actuales condiciones «no permiten asegurar a los aspirantes de los procesos selectivos la seguridad necesaria de que se puedan celebrar con normalidad», dijo ayer la consejera Esperanza Moreno, quien añadió que «a la suspensión de los plazos administrativos en vigor habría que sumar la enorme preocupación que la situación sanitaria actual genera en el conjunto de la población, además de la amenaza para la salud que la expansión del virus conlleva».

En la suspensión de la convocatoria también ha pesado el hecho de que muchos opositores han visto alteradas las condiciones de vida habituales, «dificultando una adecuada preparación de las pruebas».

Los sindicatos, en cambio, mostraron ayer su malestar por el hecho de que la convocatoria se suspenda y no se aplace, tal y como habían acordado, aseguran. Les preocupa, alertó Nacho Tornel, de CC OO, que la situación económica posterior a la crisis sanitaria implique recortes en la convocatoria.