Ocho de cada diez murcianos sufrieron estrés, ansiedad o insomnio durante la pandemia
Un amplio estudio de la Consejería de Salud revela la fatiga que padeció la sociedad regional durante las últimas olas de Covid
La pandemia ha hecho mella en el estado anímico y en la salud mental de la población, hasta el punto de que ocho de cada ... diez murcianos han sufrido estrés, ansiedad o insomnio a lo largo de estos más de dos años de crisis sanitaria, bien de forma puntual o como un problema ya crónico. También ha aumentado el consumo de ansiolíticos y de alcohol. Así se recoge en un amplio estudio que la Consejería de Salud acaba de publicar. Otras investigaciones anteriores ya habían detectado el impacto del coronavirus sobre el estado emocional de la ciudadanía, pero este nuevo informe arroja una nueva e interesante perspectiva, al reflejar cómo ha ido evolucionando este impacto a lo largo del tiempo, fruto de la fatiga pandémica.
El estudio parte de la iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que instó a los estados a monitorizar los comportamientos y actitudes de la población durante la pandemia. El Instituto de Salud Carlos III lanzó así el proyecto Cosmo-Spain, con encuestas periódicas desde 2020. En la Región de Murcia, la Consejería decidió desarrollar Cosmo-Carm, un estudio propio en colaboración con la Universidad de Murcia para conocer la situación específica en la Comunidad. Entre diciembre de 2020 y marzo de 2022 se llevaron a cabo tres grandes encuestas, con mil participantes en cada una de ellas. El trabajo ha sido coordinado por Olga Monteagudo-Piqueras, jefa del servicio de Promoción y Educación para la Salud, y María Falcón, profesora de la UMU.
El consumo de alcohol se incrementó conforme avanzaba la crisis sanitaria, pero no así el de tabaco
Los resultados permiten comprobar cómo la salud mental de la población fue empeorando conforme se alargaba la crisis sanitaria. Antes de la pandemia, el 22,9% de la población sufría ansiedad, estrés o tenía problemas para dormir todos los días o algunos días de la semana. En junio de 2021, se encontraban en esa situación el 32,3% de los murcianos. Este porcentaje ha permanecido estable durante las siguientes oleadas de Covid, pero ha aumentado la proporción de murcianos que sufren estos problemas de manera más puntual: o bien alguna vez al año (del 18,5% al 24,1%) o alguna vez al mes (del 24% al 25,9%).
Un 45% toma hipnosedantes
Esto se refleja en el consumo de medicación. El 43% de la población tomaba hipnosedantes para dormir o relajarse en junio de 2021, mientras en marzo de 2022 la cifra ascendía al 45,3%.
El estudio Cosmo-Carm detecta también «un aumento general en el consumo de bebidas con alcohol». En la primera ronda de encuestas, el 5,9% de los entrevistados admitió que bebía al menos cuatro días a la semana. En la última, el porcentaje ascendía al 7,8%. También ha aumentado el consumo esporádico, de forma que el porcentaje de abstemios pasó del 35,9% en 2020 al 22,8% en 2022. Sin embargo, no se ha registrado durante la pandemia un incremento del consumo de tabaco ni un crecimiento del juego 'online', según este estudio.
Menor percepción de riesgo
La Consejería destaca que el Cosmo-Carm es el único estudio de estas características en el ámbito autonómico. Las encuestas permiten comprobar cómo fue evolucionando la percepción sobre el riesgo de contagio y la peligrosidad de la Covid. En diciembre de 2020, cuando todavía estaban muy recientes los colapsos hospitalarios en comunidades como Madrid, con miles de muertes, el 37% de la población murciana temía enfermar gravemente si se infectaba. En marzo de 2022, ya con Ómicron como variante predominante, solo el 14% de los encuestados creían que sus síntomas serían graves si se contagiaban.
Por el contrario, a lo largo de la pandemia fue aumentando la percepción de que contagiarse era probable, sobre todo tras la irrupción de Ómicron.
El proyecto Cosmo-Carm se ha desarrollado en colaboración con la UMU; entre diciembre de 2020 y el pasado mes de marzo se llevaron a cabo tres grandes encuestas
«Hartos» de la Covid
La fatiga pandémica ha ido haciendo mella tras las sucesivas oleadas. La gran mayoría de la población se muestra en las últimas encuestas «cansada de los debates sobre la Covid en los programas de televisión, radio, periódicos, etc.», y «harta de oír hablar de Covid». Este cansancio también se deja notar en la valoración de las medidas restrictivas y preventivas. Así, el estudio refleja un aumento de quienes consideran «agotador seguir las recomendaciones y restricciones sobre la Covid». De ser una posición minoritaria, pasó a ser mayoritaria.
El cumplimiento de estas medidas ha ido cayendo, pero se ha mantenido en niveles altos en todo momento, según las encuestas. El uso de mascarilla ha sido generalizado, si bien se relajó su utilización en reuniones familiares y de amigos, en parte por la percepción de que el riesgo de contagio era mayor en establecimientos cerrados y concurridos que en casas particulares.
La campaña de vacunación también es analizada en el estudio. En diciembre de 2020, cuando todavía no habían llegado las vacunas, un segmento significativo de la población se mostraba reacio a recibir el pinchazo. En concreto, un 26,5% de los encuestados aseguraron en ese momento que no acudirían a vacunarse y un 21,9% se encontraba dudoso. Estas prevenciones desaparecieron después: las coberturas de pauta completa han superado el 90% en la Región.
Alta confianza en los científicos y baja en los gobiernos
Los murcianos han mantenido durante toda la pandemia una alta confianza en los científicos y en los centros de salud, mientras han desconfiado, sobre todo, del Gobierno central. En cuanto a la Comunidad, pasó de tener una valoración ligeramente por encima del aprobado en junio de 2021 a suspender en 2022.
En una escala del 1 al 5, los científicos llegaron a estar puntuados con un 4 en 2021, una calificación que se ha mantenido posteriormente con mínimas fluctuaciones. Los centros de salud también obtienen buena nota: entre un 3,88 y un 3,6, con un ligero descenso el pasado mes de marzo, tras el colapso que sufrió Primaria durante la sexta ola de la Covid, protagonizada por Ómicron.
Los murcianos también confían en la gestión desarrollada en sus centros de trabajo, pero son más críticos con la actuación de la Administración. Sobre todo, con la del Gobierno central, que es la institución que más desconfianza genera. Su actuación es valorada con un 2,5 en la última encuesta. Por su parte, la Comunidad, que llegó a obtener un 3,12 en diciembre de 2021, baja a un 2,77 en la última de las rondas de entrevistas.
Las medidas preventivas que se han ido adoptando a lo largo de la pandemia han contado en general con el apoyo de la ciudadanía, aunque se evidencia un deseo paulatino de ir eliminando restricciones.
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