«La mitad de los comerciales y taxistas se quedan fuera del descuento de 20 céntimos»
Las gasolineras piden «mayor concreción» en el decreto del Gobierno y que abarque a más trabajadores
La Asociación de Estaciones de Servicio de la Región alerta de que el nuevo decreto que extiende hasta el mes de marzo el descuento ... de 20 céntimos al litro de combustible para transportistas y profesionales del sector primario «deja fuera a la mitad de los profesionales que se beneficiaban el año pasado». Así lo asegura su presidente, José Baños. A su juicio, el decreto del Gobierno peca de «falta de concreción» y despierta «dudas» en el sector, lo que está generando problemas a algunos profesionales para demostrar que su consumo de carburante responde a su actividad profesional. «No está del todo clarificado», defiende.
Publicidad
Asimismo, desde las gasolineras piden que se plantee extender esta prórroga de la bonificación a otros sectores con consumos de combustible elevados. «Los agentes comerciales y los taxistas también se quedan fuera», apunta Baños. «Y los transportistas que no puedan justificar su actividad profesional tendrán que hablar con sus asesores fiscales para que les hagan la devolución de los 20 céntimos», asume.
Apuntan a que el combustible podría encarecerse entre 4 y 6 céntimos el litro por el incremento del biodiésel
Un ahorro nada nimio, máxime cuando, advierte Baños, los vientos que corren no prevén bajadas de precios. Más bien todo lo contrario. Un diagnóstico que achaca a dos factores: el incremento del componente 'bio' en el carburante –que ha pasado de un 10% obligatorio a un 10,5%– y «la estrategia del Gobierno de equiparación fiscal del gasoil a la gasolina». Baños calcula que, de entrada, el biodiésel puede incrementar el precio del combustible «entre 4 y 6 céntimos más». «Está cotizando muy alto en los mercados internacionales. A casi al doble que el combustible fósil». Por otro, augura que subirá otros cuatro céntimos si finalmente se toca en Madrid el impuesto de hidrocarburos.
Consumo desanimado
Así, de cumplirse sus expectativas, Baños teme que los altos precios continuarán desanimando el consumo «con una fiscalidad más alta y unos recursos familiares cada vez menores». «Al final el descuento nos ha hecho un flaco favor, porque nos ha obligado a financiar al Estado estos últimos meses». Y las ventas, dice, todavía no remontan. Es más, asegura que continúan en niveles pandémicos. «Continuamos con las ventas un 10% por debajo de las de 2019 y un 4% por debajo de las de 2021, antes de la guerra en Ucrania», detalla el empresario.
Publicidad
Confían en que el Estado devolverá en tiempo y forma la cantidad que les adeuda por el descuento aplicado el mes pasado
Aun así, las gasolineras de la Región se muestran confiadas de que el Estado, al menos, no sorprenderá y devolverá en tiempo y forma la cantidad que adeuda por los carburantes vendidos el mes pasado, el último en el que estuvo en vigor el descuento general de 20 céntimos. «Tenemos hasta esta semana para solicitar la devolución y hasta ahora no hemos tenido problemas. De media nos han estado pagando sobre el día 20 del mes siguiente», asegura el presidente de asociación integrada en Croem.
Froet no detecta problemas entre sus empresas afiliadas
Froet descarta que esté habiendo problemas a la hora de repostar al menos entre sus afiliados. «Las grandes empresas de transporte lo tienen garantizado a través del mecanismo de gasóleo profesional», incide Pedro Luis Sánchez. Un sistema por el cual ya se les descontaba casi 5 céntimos antes y al que ahora se les añadirán los 20. «El 90% de los transportistas están registrados en este sistema», asegura. «Puede haber alguno que por desconocimiento o por temor a dar mas datos a Hacienda no esté metido», supone.
Publicidad
No obstante, reconoce como los gasolineros que son muchos colectivos los que quedan fuera. «Hay empresas con depósitos de combustible propio, las empresas que tiene flota de camiones propia y todos los que hacen reparto en furgoneta», detalla. «Tampoco pueden acceder a otro tipo de ayudas por no tener la tarjeta de transporte», que da acceso al sistema de gasóleo profesional.
«Los que hacen transporte puro y duro, es decir, que cargan en camiones mercancía de terceros, están cubiertos». Lo que, asume, deja desprotegido al pequeño transportista. «Se van ver perjudicados los carreteros que van con sus propias furgonetas a hacer portes y los que trabajan para agencias de mensajería de última milla que, a pesar de hacer menos kilómetros, gastan mucho carburante en las rutas urbanas».
Prueba LA VERDAD+: Un mes gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión